El Partido Popular Democrático (PPD) sigue esforzándose con ahínco y tenacidad, haciendo de todo lo posible, por ser cada día más inconsecuente.
Ante el caos que se vive en nuestro país, están silentes. Cuando la desesperanza inunda al pueblo por la precariedad de vida, la destrucción del ambiente, la impunidad del crimen y de la corrupción, ellos no existen. Por la forma en que actúan, es casi imposible sacar cuál o cuáles líderes populares tienen algo de oído en tierra y están con sintonía con lo que de verdad es importante para la gente. Vamos a los hechos.
Esta semana ocurrieron 3 cosas que marcarán el devenir de Puerto Rico por mucho tiempo: 1) Reglamento Conjunto, 2) el juicio de Ángel Pérez, y 3) la radicación de cargos al que intentó matar a tiros a manifestantes en Aguadilla. ¿Alguien sabe si algún miembro del PPD ha propuesto algo importante sobre esos temas? ¿Saben si alguien ha dicho algo que merezca la atención?
Lo primero: El Tribunal Supremo determinó que el Reglamento Conjunto 2020 (RC2020) de permisos de construcción es nulo, pero el Gobernador Pedro Pierlusi hizo caso omiso e insiste en usarlo. O sea, vuelve a actuar como cuando juramentó a la gobernación en el apartamento de su hermana en el verano del 2019 y el tribunal lo sacó. Pierluisi vuelve a pasarle por encima a los 8 jueces del Supremo que votaron, su afán permitirá las construcciones ilegales y pone en juego la estabilidad social y económica, provocando un choque de poderes que violenta el orden constitucional de Puerto Rico. (Son 8 jueces porque la jueza Mildred Pabón Charneco se inhibió porque su hijo Phillip Mesa ha hecho fortuna con contratos multimillonarios en las agencias que velan ese reglamento como Desarrollo Económico, la Oficina de Gerencia de Permisos y Recursos Naturales).
¿Alguien puede describir qué han dicho los populares de este caos? ¿Alguno de los líderes del PPD ha dado explicaciones o alternativas para evitar la crisis que representa la anulación del RC2020 para las empresas? ¿Alguno se ha expresado sobre el riesgo que representa para las comunidades y el ambiente el Reglamento Conjunto 2022 que evalúa la Junta de Planificación? Esa nueva versión 2022 la revelamos en exclusiva aquí hace un año en ¡Ey! Boricua. Como no hay una voz monolítica entre los populares, el pueblo debe entender que aplauden lo que afecta tanto a empresas como al pueblo. Se aliaron al PNP en esta.
Lo segundo: El caso de corrupción contra el exalcalde de Guaynabo, Ángel Pérez, empezó esta semana. Su abogado Osvaldo Carlo y el exfiscal Ernie Cabán, junto a otros, se pasan plantado sus estrategias de defensa en WKAQ, Telemundo y cuanto medio los tome de “analistas”. Llevan el caso en el foro de la opinión pública a ver si mueven jurados, cuando se trata de otro ejemplo más del pillaje y la corrupción.
Lo que ha salido hasta ahora en ese juicio demuestra la podredumbre del empresario Oscar Santamaría que imputa al exalcalde PNP de Cataño, Félix “Cano” Delgado. Pero no podemos olvidar que tocó populares también. Convictos o acusados hasta ahora van los alcaldes y funcionarios de Cataño, Cidra, Aguas Buenas, Guayama, Trujillo Alto, Humacao y Guaynabo, por mencionar algunos.
Nadie en Puerto Rico puede decir con exactitud ahora mismo si algún líder del PPD ha dicho algo contundente sobre este esquema de pillaje. Claro que algunos populares han dado declaraciones a la prensa, pero pregúntese si alguien las recuerda. Es que no pueden porque están casados con esos esquemas, como se ve en el caso.
Lo tercero: Aguadilla. El viernes en la tarde le radicaron cargos a César Toledo Mantilla, el guardia de seguridad que disparó a matar a manifestantes que protestaban hace casi 2 meses por la continua construcción ilegal sobre la cueva las Golondrinas en Aguadilla. El guardia seguía el protocolo de quien lo contrató, el poderoso desarrollador Carlos Román, contribuyente económico a las campañas del alcalde PPD Julio Roldán y de líderes populares y penepés. El guardia fue acusado de tentativa de asesinato, disparar un arma de fuego 9 milímetros ilegalmente y por riesgo al orden público.
Lo que pasa es que todos los que estuvieron allí en Aguadilla ese 29 de enero – y quienes lo vieron en vivo por múltiples transmisiones en redes sociales – dicen que el acusado no fue quien disparó. Múltiples vídeos evidencian que era otra persona, pero el Tribunal no los quiso admitir. La Policía, el Tribunal de Aguadilla y hasta el alcalde ocultaron por casi 2 meses al país el nombre del que disparó. Una actitud completamente distinta a cuando arrestan manifestantes.
¿Algún líder popular ha dicho algo de esto? En Puerto Rico no se veía este nivel de violencia del estado y violencia corporativa en décadas, pero los populares, callados. Son dos cosas: o le tienen miedo o quieren proteger al alcalde de Aguadilla, y al de Isabela, porque esa es una zona donde hay mucho cacique popular. La pregunta ante esta actitud es, ¿es eso lo correcto? ¿Dónde quedó aquello de “pan, tierra y libertad” o es que ahora dicen “dinero, pillaje y complicidad con el PNP”? El silencio de los populares en este escándalo es demasiado elocuente.
MÚLTIPLES PROBLEMAS
Estos son sólo tres ejemplos de los graves problemas que enfrenta el PPD de cara a este nuevo ciclo electoral. Están divididos, no atraen contribuyentes a nivel institucional y tienen mucha competencia de los partidos emergentes y del PNP.
A eso se unen los problemas regionales. El viernes publiqué un artículo sobre el caos en Ponce. Se anticipa un posible referido al FEI porque más de 41 empleados municipales ya han prestado declaración ante los fiscales de Justicia y hay sobre 30 renuncias. Además de los líos por las expresiones homofóbicas de su esposa, el alcalde popular Luis Irizarry Pabón es investigado por donativos recibidos de Oscar Santamaria, y por el préstamo personal de $50,000 que tomó para su campaña electoral y que obligó a que lo pagaran empleados del municipio.
El PPD tiene líos por alcaldes convictos como el de Trujillo Alto, y por el que renunció en Mayagüez. Tiene problemas en Aguadilla y en Caguas, que a pesar de la percepción pública, hay preocupación porque el alcalde ganó por menos de 1,700 votos ante un virtual desconocido. En Aguadilla también tiene líos, al igual que el descontento que hay con el alcalde de Cayey. Carolina y Loíza son los únicos alcaldes del PPD que sacan la cara ante el país y cuya exposición, en términos generales, es positiva. Claro que tienen sus detractores, pero son inconsecuentes porque siempre se les ve que están trabajando.
Luis Javier Hernández, alcalde de Villalba y presidente de la Asociación de Alcaldes, está pendiente a ser gobernador y se enfrenta a su homóloga de Morovis, Carmen Maldonado por la presidencia del partido. En esas también están el representante Jesús Manuel Ortiz y el senador Juan Zaragoza. Así que están en sus intereses personales y particulares, no necesariamente los del país.
Deben reconocer que el PPD enfrenta a un PNP, que por más peleas internas que tenga, por más lastre de casos de corrupción lo carcoma, en el momento justo tienen la capacidad de unirse para defender los contratos, y de paso, el control del gobierno.
A pesar de que los populares tuvieron la asamblea general en febrero e intentaron presentar un frente unido, la pregunta es, ¿será eso suficiente para atraer votos? ¿Apostarán a las dinastías con el nieto de Hernández Colon, por ser eso, nieto?
Los populares se enfrentan a una posible unión del PIP y de Victoria Ciudadana, que si bien es cierto no tienen la misma fuerza que hace 4 años, juntos sacaron casi un 30% de los votos. A esos se une el Proyecto Dignidad, que se organizan con fuerza para llevar su postura conservadora e imponerse ante la diversidad. ¿Serán capaces los populares de atraer votos entre los electores no afiliados, los sectores independientes y los apáticos a la política?
Tatito, que es un político sagaz, se toma fotos con el presidente Nayib Bukele, y José Luis Dalmau, bien gracias. Los exgobernantes, mejor que ni hablen. Alejandro García Padilla es abogado del desarrollador de proyectos ilegales de Aguadilla, y Aníbal Acevedo Vilá es comentarista en la web. Sila Calderón, se ha mantenido trabajando en su fundación. Para de contar. Es poco lo que dicen o aportan a cambiar la percepción de derrota.
El país se va por el chorro y los populares, en lo suyo. En las elecciones pasadas tuvieron a quien fue su mejor carta de presentación en décadas, David Bernier, y lo dejaron solo. Suerte tuvo Bernier que no tiene que bregar con el caos actual en el PPD. Si no se enderezan, se ve difícil. Lo que queda ahora es leer el epitafio.