La propuesta de una orden ejecutiva para la independencia de Puerto Rico desafía el discurso tradicional y reaviva el debate descolonizador
Por Wilda Rodríguez
Periodista
Lo que falta es que acusen de terroristas a los promotores de una orden ejecutiva del Presidente de Estados Unidos para decretar la independencia de Puerto Rico. El pavor que les causa la posibilidad de otra alternativa de descolonización a colonialistas e independentistas ortodoxos los ha unido en una extraña coalición.
Hasta ahora, se han cuidado de llamarlos terroristas, pero no me extrañaría que a los colonialistas se les vaya la mano en su mezcla de desesperación y miedo e invoquen el Cuco.
No será un independentista el que llegue a tanto. El rechazo de independentistas a la acción de esta guerrilla no es por miedo. Es que no conciben que este grupo haya surgido, se haya organizado y haya actuado sin ellos enterarse. Que no los incluyeran en el circuito (loop), incluso para boicotear el proyecto desde adentro si no cumplía con sus criterios.
Otros independentistas, a los que yo llamo fundamentalistas, sencillamente no pueden salir de la caja. Han decidido cuáles son las condiciones ideales que deben darse para la descolonización e independencia. Nada que aborte esa lógica tiene su bendición.
Una guerrilla de nerds no estaba en la agenda de nadie. Pues aquí la tenemos. Les ha dado trabajo hasta caracterizarlos. Lo único que han reconocido es que son un grupo de sabihondos. Mi abuela les llamaría estofones.
Nadie puede negar la profundidad intelectual de los que se han identificado como autores de este proyecto. No hay improvisación ni temeridad en su acción. Intrepidez muy bien calculada sí que la hay.
Imagino cuánto le cuesta a muchos ponerse de frente a esos diez compañeros. Son amigos, prestigiosos y muy respetados individualmente. Juntos, son un laboratorio de ideas impresionante.
¿Qué es lo que ha hecho este grupo que sea tan terrible para muchos? Se han colado en el nuevo discurso del imperio. Eso es todo.
El argumento de la democracia lacerada es tan llanito que ofende. ¿De qué democracia se puede hablar en una colonia cuya existencia misma es antidemocrática? Ciertamente, disfrutamos de derechos y libertades adscritos a la mejor de las democracias posibles. Porque nos los permiten o porque nos ha costado sangre.
Es una democracia que nos pueden invalidar en cualquier momento, como hicieron con la Constitución del ELA. Es la democracia que exhibe Estados Unidos ante el mundo y que ahora mismo está en entredicho. Que sea extensible a su colonia ha sido parte del esquema imperialista que se inventaron a la trágala a fines del siglo 19, cuando se peleaban su espíritu libertador y su destino manifiesto. Perdió el primero. Pero no sin aspirar a ser reconocido como un imperio generoso.
Tuve un excelente maestro constitucionalista, mi amigo Antonio Fernós López-Cepero. Nuestras conversaciones sobre este tema eran eternas.
“Si no fuera porque tiene una Carta de Derechos tan bonita…”, me decía, y lo que añadía no es publicable. Se refería a la ley federal que conocimos como la Constitución del Estado Libre Asociado de Puerto Rico y que el Tribunal Supremo de Estados Unidos —el imperio, la metrópoli o el país administrador, como gusten— se encargó de reconocer que era una treta colonial. Una farsa.
No es que no se hubiese dicho antes. Incluso antes de que nos la regalaran, Vicente Geigel Polanco, independentista que se retiró de la Asamblea Constituyente, se encargó de denunciar que se trataba de una constitución de embuste. Advertidos estuvimos.
Por eso el argumento de la democracia mancillada es llanito. Habría que raspar muchas capas de pintura para discutir eso. La resistencia a hacerlo es monumental.
El otro argumento es que avala el estilo de gobierno por decreto de Donald Trump. Llanito también. No fuimos nosotros los que avalamos a Donald Trump. Fueron los estadounidenses. Lo único que ha hecho la guerrilla de sabihondos es usarlo como arma.
En el Caribe siempre se ha hecho referencia al personaje de Calibán de La tempestad de Shakespeare para referirse al colonizado. Hay una cita que no es muy correcta que digamos, pero que refleja la resistencia del colonizado en una expresión de Calibán: “Préstame tu lengua para maldecirte.”
El tercer argumento es que el Presidente de Estados Unidos no es el que tiene el poder de disponer de la colonia. Difiero. Mis argumentos se quedan cortos ante la opinión de los expertos. Lo que asombra es que alguien pueda pensar que la guerrilla de estofones no tomó eso en consideración y lo discutió hasta el cansancio. Obviamente, no es difícil pensar que el Presidente de Estados Unidos puede decretar que se le otorgue la independencia a Puerto Rico y enviarlo a la ratificación del Congreso. Más aún si se trata de Trump y un Congreso de republicanos cagaos ante la imponente figura de su jefe. Además, no olviden que la política exterior de Estados Unidos está en manos de su presidente. ¿O no lo habían notado?
Un cuarto argumento es que ya los independentistas tienen su propuesta de descolonización en una asamblea constitucional de estatus.
Me permito diferir porque no todos los independentistas respaldamos esa propuesta y lo hemos manifestado y discutido públicamente. Por lo tanto, darle la bienvenida a otra opción no es traición. De hecho, la misma propuesta contempla una asamblea constitucional. Es que no leen.
El quinto es que los puertorriqueños no quieren la independencia y no la han pedido. Bien. El problema con eso es que a los puertorriqueños les han hecho creer que son ellos los que deciden. Luego de tener la soberanía e independencia es cuando único estarán en capacidad de decidir su futuro, incluyendo ser estado de Estados Unidos (si lo aceptara USA). El mismo día pueden decidirlo si quieren. Pero sepan que la soberanía e independencia son un requisito para el ejercicio de la democracia. Entretanto, cualquier referéndum a esos efectos es colonial y sujeto al rechazo de Estados Unidos. Puede usted querer ser un principado de la monarquía de Trump. Querer no es poder.
Dicho esto, es preciso destacar la ignorancia y/o manipulación de los colonialistas ante la nueva propuesta. No la han leído o no han querido leerla. Se han atrincherado para combatirla por miedo, no por razón.
Carlos Rivera Lugo, uno de los proponentes principales de la orden ejecutiva, es un experto incuestionable y ha publicado un resumen detallado de la propuesta en quince puntos que me permito reproducir para ustedes porque ningún medio lo va a hacer.
- De conformidad con la expansión constitucional de la autoridad presidencial…
- Se dispone el traspaso de todos los poderes soberanos…
- Se determina la inviabilidad de la estadidad…
- Se establece que a cargo de la transición habrá una Comisión Ejecutiva…
- Se dispone para la organización de una Asamblea Constituyente…
- La Asamblea Constituyente estructurará un nuevo sistema electoral…
- Se incluye un Plan de Transición ordenado…
- Se provee para la condonación de la deuda pública…
- Se decide la terminación de la actual Junta de Control Fiscal…
- Se garantizan los beneficios del Seguro Social y Veteranos…
- Se reconoce la ciudadanía dual…
- Se provee para el libre tránsito de ciudadanos…
- Se establece un nuevo marco de relaciones…
- Se dispone que se establecerá un Tratado de Libre Comercio…
- Se determina el uso del dólar como moneda…
Le puede a usted gustar o no. Le pueden gustar algunas cosas y otras no. Lo que no puede hacer usted, si ha leído hasta aquí, es decir que no es una propuesta bien pensada en su propia intrepidez.
Tampoco le puede ser difícil a quienes lean entender que la propuesta no sería acogida como santa y buena por Donald Trump.
¿Pero saben qué? Ya ha logrado su propósito, lo impensable: se está discutiendo la independencia de Puerto Rico como nuevo sabor de mantecado.
Excelente
Tienes absoluta razón excepto que, aparte de la propuesta de independencia por orden ejecutiva y luego enviada al Congreso… , todo lo demás está estipulado en el consenso para la independencia incluido en el proyecto Young.
Gracias por este escrito tan orientador.
Mi admiración, respeto y agradecimiento.
Soy de las que piensan igual que usted, nunca nos imaginamos que la independencia estuviera tan en boca de tantos!.
Excelente como siempre….
Gracias por tu escrito respeto tu opinión
Gracias… “ La mama de lxs pollitxs”
Gracias. Un efecto inmediato de la discusión interna que promueve o más bien provoca la propuesta, es que la saca de las manos y control de los políticos de partidos y de otros que entre todos han presentado las objeciones que enumeras y que de entrada se descartan. Seguimos, que esto es lo único bueno que trae este 2025, por ahora. Porque en el panorama internacional suceden cosas importantes.
Pregunto: Estoy aprendiendo sobre estos temas q. me interesan muchísimo!
Debo entender q. en el punto 11 se incluye el español como idioma oficial de la nación y el inglés como pudieramos aprender otros idiomas tales como mandarín, el francés, italiano, portuqués, entre otros?
Simple y sencillamente: excelente artículo de opinión. Los hipócritas que utilizan el asunto de falta de democracia como por ejemplo Anibal Acevedo Vila entre otros no van a la raíz del problema, en el sentido de que en una colonia no hay democracia posible.
Creo que la propuesta de una orden ejecutiva con 20 annos de transición ha sido genial. Espero que la administración de Trump la acepte. Las únicas dos opciones que tenemos es independencia o quedarnos como estamos. La estadidad no no las van a dar ni el ELA mejorado. Seremos una isla más en el Caribe, como la francesas e inglesas, seguiremos con una relación con el poder colonial en algunos asuntos. Me suena muy bien! El status quo es intolerable!
No creo en la libre determinación con 530 años de coloniaje y una izquierda provenientes de élites hijos del miedo