Por: Anabelle Nieves
Terapeuta Ocupacional
Certificada en Rehabilitación Vocacional Psiquiátrica y Consejería en Adicción
Especial para EyBoricua
San Juan, 13 de septiembre – El suicidio es la tercera causa de muerte violenta en Puerto Rico. Especialistas en el campo de la salud mental entienden que el suicidio es un asunto complejo que incluye factores psicológicos, sociales y biológicos.
La persona que comparte un sentido de desesperanza, impotencia, tristeza, se observa ansiosa, irritable, con cambios en el patrón de alimentación y sueños o comienza a presentar bajo rendimiento escolar o laboral, podría desarrollar pensamientos o comportamientos suicidas.
El ser humano que experimenta una o alguna de estas situaciones pierde el sentido de pertenencia. Su rutina diaria se deteriora y experimenta un sentido de que no puede ser productivo, disminuyendo así su participación en la sociedad y perdiendo el balance entre sus ocupaciones. Las ocupaciones son las actividades que les permiten participar de su cotidianidad, y satisfacer sus necesidades biológicas, sociales y psicológicas.
La terapia ocupacional atiende las discapacidades asociadas con trastornos físicos, sensoriales y mentales, que limitan el desarrollo de actividades en el entorno social, familiar y laboral. El objetivo es que la persona alcance el mayor grado de independencia y de competencia en los diferentes contextos de su vida diaria.
Cualquier trastorno mental provoca alteraciones de tipo emocional y/o del comportamiento que afectan procesos cognitivos básicos como la motivación, la conducta y el aprendizaje. En este sentido, la terapia ocupacional aplicada en la salud mental va trabajando con el paciente hasta lograr que este vaya reorganizando y equilibrando sus ocupaciones y, por ende, su diario vivir.
En la prevención del suicidio, la terapia ocupacional aplica diferentes tipos de intervenciones dependiendo de las necesidades de cada persona con el propósito de desarrollar diferentes destrezas. Por ejemplo, se ejecutan las actividades con propósito de promover la toma de decisiones, destrezas para la solución de problemas, la tolerancia a la frustración, destrezas de atención, concentración y seguimiento de instrucciones. Se utilizan las actividades basadas en la ocupación para facilitar la integración a sus roles del diario vivir.
También se evalúa el nivel de funcionalidad durante la ejecución de actividades como por ejemplo de cuidado propio con el objetivo de educar y adiestrar a la persona para que desarrolle un nivel óptimo de independencia. Esta intervención se puede ofrecer en el formato individual o grupal.
Los profesionales de terapia ocupacional ponen en práctica actividades sicoeducativas sobre manejo de ansiedad, comunicación asertiva, manejo de tiempo libre, promoción de la salud, higiene del sueño, manejo de presupuesto, entre otras.
Como parte del proceso es importante que la persona comience a reconocer ese sentido de ser persona; que recupere la motivación y que pueda verse y sentirse como un ser útil. Se trabaja para que el paciente reconozca estrategias saludables en el manejo de su condición, sobre todo identificar aquellas señales que le permitan anticipar situaciones de crisis y así atenderla para prevenir una conducta suicida.
La prevención es vital en el proceso de recuperación de una situación emocional, es el balance lo que ayudará a evitar que el paciente tenga una recaída en la condición. Siendo la ocupación una de las estrategias en la prevención del suicidio, es pertinente y necesario la presencia de un profesional de terapia ocupacional como parte del equipo terapéutico.
De necesitar ayuda puede llamar a la Línea Pas de Assmca al 1-800-981-0023.