Panamá, 31 jul (EFE) – Panamá se alista para reabrir su sector turístico y tiene claro que en una primera fase el nicho a apuntar es el ecoturismo, que ofrece lo que todos los estudios indican que buscan aquellos pocos que se están atreviendo a viajar durante la «nueva normalidad»: naturaleza y espacios abiertos.
«Nuestra estrategia general está orientada en esa forma, en que el énfasis va a estar más volcado a la parte de naturaleza, ecoturismo, que a otras actividades que también son muy fuertes y en las que tenemos muchas posibilidades a futuro», dijo este viernes a EFE el administrador de la Autoridad de Turismo de Panamá (ATP), Iván Eskildsen.
Hay que «llegar a ese grupo reducido de viajeros que tal vez va a estar aventurándose primero o antes de que exista una vacuna o un tratamiento (contra la COVID-19) que pueda lograr que sea más seguro el viaje», afirmó el titular de la ATP.
Quienes «tal vez van a estar más dispuestos» a viajar en esta primera etapa «son los más jóvenes, los más aventureros, que están más orientados a espacios abiertos, al aire libre, a la naturaleza», explicó Eskildsen citando estudios internacionales, y de allí que ese sea el foco de la estrategia general de turismo del país.
CAMPAÑA «PANAMÁ POR NATURALEZA»
Para calentar motores, la ATP lanzó la campaña nacional «Panamá Por Naturaleza», que no es una invitación a ir a los sitios turísticos ya que en casi todo el país rigen medidas de confinamiento, sino que invita a los panameños a «reconectarse con su esencia».
«La campaña promueve una serie de valores con los cuales queremos que los panameños nos asociemos: aventureros por naturaleza, creativos por naturaleza, y otros (…) también es una forma de ir preparándonos psicológicamente para recibir a los turistas extranjeros cuando llegue el momento de que se vuelvan a abrir la fronteras», explicó Eskildsen.
El Gobierno de Panamá, uno de los países más afectados por la pandemia de la COVID-19 en el continente, suspendió por 30 días los vuelos internacionales el pasado 22 de marzo y ha prorrogado la medida cuatro veces, por lo que la situación seguirá así al menos hasta el próximo 21 de agosto.
LA PANDEMIA GOLPEA AL TURISMO
Con los aeropuertos clausurados, los hoteles cerraron. Ha sido un golpe muy duro para un sector turístico que arrastra varios años de crisis, con una bajada sostenida del 3% anual en la llegada de visitantes desde 2015 y una ocupación hotelera que apenas llegó al 39% en el primer trimestre de este año.
«Ahora estamos al 0%», y determinar el impacto de la crisis «depende de la velocidad de la reapertura, para ver qué cantidad de turistas pudiésemos recibir este año de alguna forma», dijo Eskildsen.
El titular del ente rector del turismo admitió, sin embargo, que la cifra de «entre 60% y 80% de caída de turistas a nivel mundial pronosticado por la Organización Mundial de Turismo es cercana a lo que estemos viendo como proyección para este año en Panamá».
El sector turístico panameño registra pérdidas por unos $12 millones diarios, dijo a inicio de este mes a Efe el presidente de la Cámara Nacional de Turismo (Camtur), Ernesto Orillac, quien recordó que antes de la COVID-19 el turismo aportaba $4,000 millones al Producto Interior Bruto (PIB) del país.
HOTELES-HOSPITAL
En el contexto de la pandemia, el sector hotelero y el Gobierno panameño llegaron a un acuerdo para que 14 hoteles, que representa 2,000 habitaciones, funcionen como hospitales para aislar a enfermos de la COVID-19 con síntomas leves a moderados.
Eskildsen afirmó que ya se refrendó el pago de buena parte de la deuda que se mantenía con los hoteles-hospital, y que se están revisando ideas para ver la posibilidad de darles incentivos porque el costo de la habitación «es reducido, ajustado, tomando en cuenta la pandemia».
Panamá, que vive una explosión de casos desde hace dos meses, acumula al menos 64,191 contagios confirmados y 1,397 muertes por la COVID-19. Hasta el jueves, había 666 pacientes en hoteles-hospital.