San Juan, Puerto Rico (EFE) – La Guardia Costera estadounidense informó este viernes que una investigación suya reveló que la descarga de combustible encontrado en Puerto Real, en Cabo Rojo, provienen de un buque militar anclado y en desuso.
El pasado 30 de julio, la División de Manejo de Incidentes de la Guardia Costera en San Juan, en coordinación con el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales de Puerto Rico y las Fuerzas Unidas de Rápida Acción de la Policía local y la NOAA llevaron a cabo la investigación preliminar por un brillo reportado en Puerto Real.
Varios días más tarde, la investigación evidenció que el buque fue abandonado en la década de 1990 y transferido al Programa de Conservación de Arrecifes de Coral de la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de EE.UU. en 2022.
Aunque la embarcación no contiene carga o contaminantes, las autoridades temían que este se usara como basurero ilegal.
Igualmente, no se encontraron restos de algún otro líquido o contaminante.
Ante todo ello, los guardacostas aseguraron que no existe evidencia de combustible adicional que afecte la vida marina en el área donde se halló el buque, adjunto al velero de pesca G. Saba.
Los investigadores encontraron además un coral pegado a la nave, el cual proseguirán a examinar e identificar.
Además, el 1 de agosto se creó un fondo monetario para contratar a la organización de remoción de derrame de combustible Clean Harbors para desarrollar un plan para remover cualquier contaminación que haya liberado el buque.
Un día después, los guardacostas, oficiales de la NOAA y de Clean Harbors regresaron al lugar, avistando que ningún coral estaba en peligro o amenazado en el casco del buque, para entonces dar paso a la investigación final.