Pekín, 22 sep (EFE) – China presentará unos objetivos de reducción de emisiones de dióxido de carbono «muy potentes» antes de que termine el año, reveló el asesor especial del Gobierno del país asiático para Asuntos de Cambio Climático, Xie Zhenhua.
«Vamos a lanzar a tiempo una estrategia de desarrollo a largo plazo y baja en carbono muy potente. El requisito del Acuerdo de París es que se haga antes de final de año, y estamos haciendo todos los esfuerzos para acelerar el proceso y completarlo», explicó quien fuera jefe de las delegaciones chinas a las conferencias sobre crisis climática de la ONU entre 2007 y 2018.
Sin embargo, no será posible conseguir que el gigante asiático -uno de los países más contaminantes del mundo- alcance esa «neutralidad de carbono» si sigue «confiando en los métodos tradicionales y convencionales», por lo que Xie reclamó que China «se tome en serio la innovación tecnológica».
«Las tecnologías de cero emisiones nos pueden ayudar a reducir los costes y a alcanzar nuestros objetivos (medioambientales)», indicó el asesor, quien recordó que su país emitió en 2019 350,000 millones de yuanes ($51,654 millones) en bonos de «financiación verde» destinados a proyectos que contribuyen a la consecución de objetivos de desarrollo sostenible.
Xie hizo estas declaraciones este martes durante un debate vía videoconferencia con el ex primer ministro australiano Kevin Rudd, organizado por el organismo del que este último es ahora presidente, el Instituto de Política de la Asia Society.
El asesor gubernamental chino apuntó que Pekín diseñará «políticas de limitación muy estrictas» para el sector de generación energética con carbón, y agregó que, pese a que la prensa internacional afirme que China ha seguido aprobando proyectos de carbón en los últimos años, «el pico de consumo fue en 2013, y desde 2015 se estabilizó».
«La realidad en China es que nunca hemos superado los niveles de 2013 a 2015», subrayó el también exvicepresidente de la Comisión Nacional de Reforma y Desarrollo (CNRD, el principal planificador económico chino) y actual presidente del Instituto de Cambio Climático y Desarrollo Sostenible de la universidad pequinesa de Tsinghua.
MÁS RENOVABLES E INDUSTRIA «INTELIGENTE»
Para sustituirlo -China consume la mitad del carbón mundial y en 2017 el 58% de la energía producida en el país provenía de ese mineral- Xie apostó por desarrollar otras fuentes de energía como el gas o la nuclear, y por elevar el peso de las renovables sobre el ‘mix’ energético nacional.
Con la vista puesta en el futuro inmediato, Xie apuntó que es necesario que el sector industrial, del que emanan el 70% de las emisiones del país, alcance su pico de contaminación durante el período 2021-2025, el del decimocuarto plan quinquenal chino, que será presentado en octubre.
El asesor habló de modernizar la industria manufacturera y de hacerla «inteligente» para desarrollarla «en una dirección de descarbonización».
Por último, Xie también reconoció que China debe «hacer más» en términos de desarrollo de transporte no contaminante, ya que, según sus predicciones, las emisiones de este sector seguirán creciendo en el futuro a pesar de que el país «lidere el desarrollo mundial» del vehículo eléctrico.