El accidente suspendió todos los vuelos en el aeropuerto de la capital estadounidense. El FBI descarta que haya sido un acto criminal.
Una noche de terror se vivió en Washington D.C. este miércoles cuando un avión de American Airlines y un helicóptero colisionaron en pleno aire, cayendo al río Potomac cerca del Aeropuerto Nacional Ronald Reagan. El choque, que ocurrió alrededor de las 9:00 pm (hora del Este), dejó a todos los vuelos suspendidos en el aeropuerto, mientras equipos de rescate y autoridades locales trabajaban a toda prisa en la zona.
El avión siniestrado, un Bombardier CRJ700 operado por PSA Airlines (parte de American Airlines), estaba en su vuelo 5342 proveniente de Wichita, Kansas, y se aproximaba a la pista 33 del aeropuerto cuando impactó con un helicóptero Sikorsky H-60, según informó la Administración Federal de Aviación (FAA).
Un video captado por una cámara del Centro John F. Kennedy para las Artes Escénicas pareció mostrar el momento exacto del choque, mientras el avión se precipitaba hacia el río. Afortunadamente, no se reportaron muertes en el incidente, aunque las autoridades siguen investigando las circunstancias.
El FBI, que ya está en el lugar, dejó claro que no hay señales de que el accidente haya tenido motivos criminales o terroristas. En un comunicado, un portavoz de la agencia aseguró que su personal está colaborando en la investigación, pero descartaron cualquier vínculo con un acto deliberado.
Desde la aerolínea, American Airlines expresó en un comunicado: «Hemos tenido conocimiento del incidente en el que estuvo involucrado el vuelo 5342, operado por PSA, en su ruta desde Wichita hacia Washington D.C. Seguiremos brindando información conforme esté disponible».
El presidente de los EE. UU., Donald Trump, también ha sido informado sobre el accidente, mientras los esfuerzos de rescate siguen en marcha.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, afirmó en Fox News que los pensamientos y oraciones de la Administración Trump están con todos los afectados.
«Pedimos al público de esta zona que, por favor, permanezca a la espera de las instrucciones de las fuerzas del orden y les permita hacer su trabajo mientras intentan salvar vidas», indicó Leavitt.