Ponce (EFE) – El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, prometió este lunes en Puerto Rico que las ayudas para la recuperación van a llegar sin retrasos con el objetivo de reconstruir la isla «más rápido» y «en una forma resiliente» ante nuevos huracanes.
Su primera visita a Puerto Rico como presidente, de tan solo tres horas de duración, estuvo centrada en inspeccionar los daños causados por el reciente huracán Fiona y en mostrar su «compromiso» con la isla, que siente que no recibe el apoyo necesario de EE.UU. o que este llega tarde.
«Vinimos en persona para mostrar que estamos con ustedes, todos los estadounidenses están con ustedes, mientras se recuperan y reconstruyen», subrayó Biden para calmar los temores de este Estado Libre Asociado a EE.UU.
Tras el huracán María de 2017, que causó 3,000 muertos y una total devastación, se aprobaron fondos federales millonarios para la reconstrucción de la isla, pero estos se retrasaron unos tres años, con lo que los proyectos están avanzados en menos de un 25%.
LA ISLA RECIBIRÁ «CADA DÓLAR» PROMETIDO
«Nos aseguraremos que recibirán cada dólar prometido. Estoy determinado a ayudar a Puerto Rico a construir más rápido que en el pasado y más fuerte y mejor preparado para el futuro», aseveró en su discurso en el puerto de Ponce.
Biden afirmó que la reconstrucción debe ser total y «en una forma resiliente» con el objetivo de que «cuando otra tormenta venga, que vendrá, no tengamos los daños que han causado antes».
Para ello, anunció oficialmente más de $60 millones en fondos para asegurar diques, fortalecer muros y crear un sistema de alerta que mitigue las inundaciones en caso de huracanes.
También citó como prioridades la reconstrucción de la infraestructura, como carreteras y puertos, y la modernización de la red eléctrica, cuya fragilidad quedó de nuevo patente con Fiona al producirse un apagón general en la isla.
Fiona causó la muerte de al menos 25 personas, en su mayoría de forma indirecta, y daños catalogados por las autoridades de catastróficos, lo que llevó a Biden a declarar el estado de desastre mayor.
«La gente de Puerto Rico continúa levantándose con resiliencia y determinación. Se merecen toda la ayuda que su país les pueda dar», afirmó Biden, el séptimo presidente de EE.UU. en visitar la isla de viaje oficial.
El mandatario estuvo acompañado por la primera dama, Jill Biden; el gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi; el alcalde de Ponce, Luis Irizarry; la comisionada residente en Washington, Jenniffer González, y la congresista Nydia Velázquez, entre otros.
Fue informado brevemente del proceso de reconstrucción de la isla y visitó la escuela Centro Sor Isolina Ferré Aguayo, donde se reunió con familias y líderes comunitarios afectados por el huracán.
El director ejecutivo de la Oficina de Recuperación, Reconstrucción y Resiliencia de Puerto Rico (COR3), Manuel Laboy, dijo a Efe en Ponce que estaba «complacido» con el resultado de la visita porque Biden «se comprometió con Puerto Rico».
Laboy explicó que se pidió a Biden que, tras Fiona, «no estemos años sino semanas visitando los proyectos impactados para echarlos a correr inmediatamente», así como revisar los estimados de costo fijo porque este último huracán «cambió el juego».
UN CAMBIO CON RESPECTO A LA ADMINISTRACIÓN DE TRUMP
Si durante su discurso Biden reconoció que las ayudas en el pasado no han llegado a tiempo, antes de arribar a la isla dijo a los periodistas que los puertorriqueños «no han sido muy bien atendidos» con anterioridad.
Su predecesor en la Casa Blanca, el republicano Donald Trump (2017-2021), protagonizó numerosos desplantes a Puerto Rico, incluidos durante su visita a la isla en octubre de 2017, tras el huracán María.
En suelo puertorriqueño, aseguró que el desastre causado por María no era «una catástrofe real», como sí lo fue Katrina en 2005, y lanzó rollos de papel higiénico a los ciudadanos congregados, lo que despertó gran malestar en la isla.
Desde entonces, la lenta recuperación de Puerto Rico se ha visto además afectada por los terremotos de 2020, que impactaron especialmente Ponce, y ahora el huracán Fiona.
Al respecto, el gobernador Pierluisi destacó en su alocución en el puerto de Ponce el «firme apoyo» de la Administración de Biden, que ha quedado demostrado -agregó- con «acciones concretas».
Pierluisi también solicitó que se aumente de 30 a 180 días el periodo de emergencia en el que las reparaciones son pagadas al 100% por el Gobierno federal.
Una muestra del apoyo de la administración Biden-Harris es que en febrero pasado se liberaron $1,300 millones para que Puerto Rico pueda protegerse contra futuros desastres climáticos.
Pese a ello y coincidiendo con la visita, que para muchos puertorriqueños fue demasiado breve, han surgido más reclamos para mejorar la isla, como por ejemplo aumentar los fondos para el maltrecho sector sanitario.
Algunos también aprovecharon para pedir la «estadidad», es decir, la anexión de la isla a EE.UU., una de las opciones estipuladas en un proyecto de referéndum que todavía debe aprobar la Cámara federal.