Por Miguel Díaz Román
Especial para EyBoricua.com
San Juan (5 de diciembre de 2021) – La creación de un banco de desarrollo con énfasis en promover la llamada economía “verde”, que permita la explotación de las energías renovables, auspiciar y establecer nuevos centros de investigación, y utilizar los fondos federales de recuperación económica para ampliar la infraestructura existente y la educación, fueron algunas de las recomendaciones del nobel de economía Joseph Stiglitz para encaminar la económica del país por una ruta de crecimiento luego de que se apruebe el Plan de Ajuste de la Deuda (PDA).
Stiglitz mencionó como áreas de oportunidad el desarrollo de la agricultura, el turismo y “el turismo de salud” y destacó la importancia de viabilizar que la banca provea financiamiento “local”, con el fin de que el dinero llegue especialmente a los individuos y a las pequeñas empresas en las comunidades.
Sostuvo que la presencia todo el año de la luz solar en la isla es un activo que el país debe utilizar para generar energía eléctrica e incluso, exportar energía hacia otras áreas del Caribe.
El economista recordó que no todos los países poseen recursos naturales y no todos pueden crecer económicamente y en ese contexto, recomendó aprovechar las ventajas que ofrece la relación política con los Estados Unidos y la cercanía geográfica con ese país, para crear lo que llamó “una estructura de crecimiento sostenible a largo plazo”.
Stiglitz hizo las expresiones durante la Cumbre de Política Pública de Crecimiento, una actividad auspiciada por el Centro para una Nueva Economía (CNE), que se celebró el pasado viernes en el Hotel Sheraton, ubicado en el Distrito de Convenciones en San Juan.
El economista renovó sus ataques contra la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) y la ley Promesa (en una visita al país en 2017 atacó las políticas “draconianas” impuestas por el organismo federal) al sostener que no han creado mecanismos para estimular el crecimiento económico. Sostuvo que el pago de la deuda acordado en el PDA, que aún no ha sido aprobado en el Tribunal Federal, comprometerá dineros del fisco para satisfacer los reclamos de los acreedores, lo que puede impedir que el país emerja del estancamiento económico que por más de 15 años a lacerado su economía.
Stiglitz abogó por un pago de la deuda “sostenible” y advirtió que “si los acreedores le piden mucho, Puerto Rico no crecerá y la deuda no será sostenible”.
La participación de Stiglitz no trajo un nuevo acercamiento a la problemática económica del país, pues sus propuestas ya han sido plantadas en distintas instancias en el debate público. Quizás lo más novedoso de sus propuestas es que con la luz solar la isla podría convertirse en una potencia energética que le permitiría exportar electricidad a los vecinos caribeños. No obstante, el economista no abundó en los detalles sobre los retos que conlleva lograr esa ambiciosa meta.
Incapaz el país de diseñar un nuevo modelo económico
El economista Francisco Catalá describió un derrotero trágico para la economía del país debido a la incapacidad manifiesta de sus líderes para diseñar un nuevo modelo económico. Recordó que 80 años atrás el gobierno había creado una empresa incubadora de nuevas iniciativas empresariales para lograr la seguridad alimentaria, un tema que ha surgido recientemente en la taxonomía agrícola del país, y que fue abandonado “porque salía más barato importar alimentos” y debido a que la política pública se abocó a estimular la importación de capital.
Catalá indicó que la política pública para el desarrollo económico ha estado marcada por la improvisación, mientras el gobierno denota una profunda desorganización y sus recursos son depredados por lo que llamó los “cazadores de rentas”.
Sostuvo que los fondos federales de recuperación, tras los huracanes Irma, María, los terremotos y la pandemia, generan una actividad económica temporal y que al final de cuentas los fondos se invierten en consumo y elevando el monto de las importaciones y trasladando la ganancia a las empresas que exportan bienes y servicios a Puerto Rico.
Durante el foro salió a relucir la exigencia de la JSF a la administración de Pedro Pierluisi para que la proyectada reforma contributiva, anunciada recientemente por el gobernador, debía ser “neutral”.
Esta exigencia implica que los ingresos que se reduzcan a causa de la posible reducción de las tasas contributivas a determinados sectores o en la merma de impuestos, se deberán recuperar de alguna manera (posiblemente con alzas en determinadas tasas contributivas o en impuestos) con el fin de evitar que bajen los ingresos proyectados en el plan fiscal certificado.
La secretaria de Hacienda, Teresita Fuentes, quien dialogó con el director de política pública del CNE, Sergio M. Marxuach, sobre los diversos retos que enfrenta el fisco local, destacó que la exigencia de la JSF sobre la propuesta reforma contributiva “requerirá un análisis muy amplio y es muy difícil que sea neutral”, lo que anticipa posibles choques entre el gobierno y el organismo federal.
Favorecen el IVA y una tasa contributiva única
Fuentes elaboró su receta para una reforma contributiva en la que respaldó eliminar las tasas contributivas sobre ingresos y establecer una tasa única que aplicaría a todas las personas independientemente de sus niveles de ingresos. Propuso “ajustar” otros impuestos con el fin de aliviar los efectos adversos de la tasa única en los sectores de bajos ingresos.
Favoreció sustituir el Impuesto de Ventas y Uso, que se impone a las ventas en los establecimientos comerciales, por un Impuesto al Valor Añadido, que se impone en diversas etapas en la cadena de distribución. Respaldó eliminar el impuesto al inventario y propuso recuperar los ingresos que genera ese impuesto, realizando una tasación de propiedades no tasadas, para luego imponer el impuesto a la propiedad inmueble.
De hecho, Fuentes advirtió el gran reto que enfrentará el Departamento de Hacienda con la determinación del Servicios de Rentas Internas federal de eliminar el beneficio que actualmente cobija a las corporaciones foráneas y que permite acreditar a nivel federal el pago que realicen en Puerto Rico por la contribución del 4 %, establecida por la Ley 154 de 2010 y que se le impone a las ventas y servicios que estas empresas realicen a sus corporaciones matrices.
Según Fuentes, el cambio requerirá renegociar los decretos contributivos de estas empresas para garantizar los ingresos de la contribución del 4 %, que ascienden a cerca de $2,000 millones.
Amenazada la atracción de empresas extranjeras
Otro reto que enfrenta el país es la tasa internacional de 15% para las corporaciones extranjeras. Esta contribución internacional es producto de un acuerdo que integra 130 países, entre los que figura Estados Unidos, y que pretende eliminar los paraísos fiscales.
Estos cambios, según indicó Fuentes, amenazan la oferta de baja imposición contributiva utilizada por el gobierno local para atraer empresas extranjeras.
Además, la ex secretaria de Hacienda dijo que Estados Unidos fijará su tasa contributiva contra las corporaciones en 21%, lo que representará una desventaja para el país, que aún mantiene para ese sector una tasa de 39 %. Marxuach indicó que la tasa efectiva, aquella que pagan las empresas después de aplicar determinadas deducciones, era más baja que el 39 %.
Pero Fuentes replicó “hay empresas que pagan el 39 %” y advirtió que tales retos amenazan con reducir los ingresos del gobierno e impedir que pueda cumplir con el pago de deuda acordado en el PDA.
Los incentivos contributivos que ofrece el gobierno a las empresas y a los individuos, como herramienta para estimular el desarrollo económico, resultaron trasquilados en algunas de las intervenciones realizadas en el foro.
En entredicho los incentivos contributivos
Durante su participación, Stiglitz defendió la necesidad de establecer políticas contributivas “bien diseñadas” para favorecer el crecimiento económico del país y rechazó las leyes 21 y 22, que conceden beneficios contributivos a individuos de ingresos multimillonarios, porque “sus costos exceden los beneficios”, lo que fue respaldado con un aplauso de la concurrencia.
Por su parte, Fuentes y Marxuach arremetieron contra los cerca de 425 incentivos contributivos que ha mantenido el gobierno durante décadas, lo cuales no producen beneficios tangibles y erosionan los ingresos del fisco y, a su vez, provocan aumentar las tasas (para recuperar los ingresos distribuidos en incentivos) en una base contributiva que es cada vez más pequeña a causa del cierre de empresas, el alto desempleo y la emigración de individuos.
Marxuach recomendó incentivar destrezas que sean útiles para el desarrollo económico como, por ejemplo, la educación bilingüe y el estudio de la ingeniería.
En el foro también participó, a través de un video, Ángel de la Fuente, quien dirige la Fundación de Estudios de Economía Aplicada, en Madrid, España.
De la Fuente recomendó al país abordar la agricultura con renovado impulso para revitalizar los cultivos tradicionales utilizando los avances tecnológicos, una estrategia utilizada con gran éxito en la región de Almería, ubicada en la Comunidad Autónoma de Andalucía. Debido al gigantesco volumen de productos agrícolas generados en esta región a Almería se le conoce como la “Huerta de Europa”.
En la actividad se discutió a profundidad cómo debe colaborar la academia con el gobierno para mejorar las políticas y servicios públicos y las transformaciones necesarias que requiere la educación postsecundaria para elevar el nivel educativo de la población y alcanzar una mayor calidad de vida.
Se le olvidó al economista que PR no tiene la capacidad política e intelectual para hacer lo que propone. Lo que tenemos una clase política y falsos líderes tan ignorantes que para colmo, usan los fondos disponibles para el tumbe.
Contando con esta gente, llega la tercera guerra mundial y no hemos empezado.