Bogotá, 5 jun (EFE) – La preservación de la biodiversidad del planeta es un compromiso que debe asumir el mundo tras la pandemia del coronavirus, crisis que ha puesto en evidencia la frágil relación del ser humano con la naturaleza, advirtieron autoridades y expertos en la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente.
Justamente por la pandemia la celebración de este año, centrada en la biodiversidad, tuvo que ser virtual, y Colombia, en su condición de país anfitrión, reunió junto con la ONU a unos 30 especialistas en un foro que puso de manifiesto la necesidad de que la humanidad mejore sus hábitos y abrace la sostenibilidad para evitar una catástrofe ambiental y de paso mitigar el cambio climático.
«Un virus (…) puso de rodillas a la economía global y en realidad ha afectado a los más vulnerables de la sociedad y eso simplemente ha resaltado, incluso mucho más que otras pandemias, los enormes costos y riesgos de nuestra desequilibrada relación con el planeta», dijo el director del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés), Marco Lambertini.
Por eso abogó por un «nuevo trato para la naturaleza y la gente» que le permita al planeta convertirse en un sitio «positivo» en lo relacionado con el medio ambiente.
«Para lo que necesitamos este acuerdo es exactamente para prevenir problemas como los que hemos estado sufriendo en las últimas semanas. Hay que dejar de perder naturaleza y de perturbar los lugares naturales; hay proteger las especies y, particularmente para hacer eso hay que ecologizar nuestra economía», advirtió.
UN LUGAR PARA LA NATURALEZA
En la apertura de la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, afirmó que la existencia humana necesita de ecosistemas «saludables, ricos en biodiversidad», por lo que hizo un llamamiento para que se le dé «a la naturaleza el lugar que merece» tras la pandemia.
«En todo el mundo la naturaleza nos está enviando un mensaje claro: estamos dañando el mundo natural en perjuicio nuestro. La degradación de los hábitats y la perdida de biodiversidad se están acelerando en todas las regiones y la variación del clima está empeorando», lamentó.
Como ejemplo de ello puso que «los incendios, las inundaciones, las sequías y las supertormentas son más frecuentes y perjudiciales» que hace una décadas, mientras que «los océanos se están calentando y acidificando, destruyendo los ecosistemas de corales y reduciendo la productividad».
El presidente del World Resources Institute, Andrew Steer, advirtió que la huella ecológica de los seres humanos ha crecido exponencialmente en los últimos 100 años por el aumento de la población, razón por la cual considera que la gente necesita «cambios sistemáticos en el sistema de comida, de consumo y de diseño de ciudades».
MAYOR COMPROMISO CON LA AMAZONIA
Durante la jornada se hizo énfasis en la protección de la Amazonia, que hoy está en peligro por la deforestación descontrolada y el cambio climático, por lo cual los expertos coincidieron en que es necesaria una mayor coordinación de gobiernos, organismos y comunidades para lograr su desarrollo sostenible.
La vicepresidenta de Conservation Internacional, Daniela Raik, considera que uno de los mayores activos de la selva amazónica es su capacidad de retener carbono, por lo que advirtió de la importancia de contener la deforestación para evitar un agravamiento del cambio climático.
«Sabemos que gran parte de las emisiones de carbono provienen de la deforestación y el cambio en el uso del suelo. La Amazonia es una enorme reserva de carbono y en la medida en que ese bosque se deforesta y degrada, ese dióxido de carbono se libera y contribuye al cambio climático global», dijo.
En esa línea, el director del Instituto Humboldt, referencia en investigación ambiental y de biodiversidad en Colombia, Hernando García, manifestó que es necesario empoderar a las comunidades locales para que, de forma organizada, aprovechen la riqueza natural para desarrollar nuevas economías a partir de la innovación financiera.
«La ciencia tiene un rol fundamental en esos procesos fundamentales de la conservación de la Amazonia», afirmó.
PROPUESTA AMBICIOSA
El presidente colombiano, Iván Duque, en su condición de anfitrión, hizo una propuesta ambiciosa de consolidar en el mundo una «genuina ética ambiental».
«Estamos en un momento de profundas reflexiones sobre la naturaleza, sobre el cambio climático, sobre cómo debemos comportarnos, sobre cuál debe ser la ética de nuestra sociedad para proteger las especies, los ecosistemas», dijo el mandatario.
El jefe de Estado colombiano, que valoró que la elección de su país para liderar la jornada fuese tomada con base en su gran biodiversidad, señaló que en esta época de pandemia la humanidad debe tener la capacidad «de cambiar las tendencias frente al cambio climático y al calentamiento global».
«El cambio climático trae efectos devastadores en muchos ecosistemas, amenaza la biodiversidad, nuestros glaciares y, por supuesto, también termina elevando el nivel del mar que afecta la sostenibilidad de muchos entornos costeros», aseveró.
Por eso el mandatario subrayó que la aspiración del mundo «no puede ser volver a ser como estábamos antes, sino que debe ser salir de la pandemia como una mejor sociedad».