El presidente de EE.UU., Joe Biden, viene a Puerto Rico en su avión presidencial esta semana. Llegará por Ponce, por eso al Aeropuerto Mercedita, que fue el más afectado por el huracán Fiona, lo están acondicionando.
Si la comisionada residente Jenniffer González (JGo) viene en el avión con Biden, no cabe la menor duda que será la candidata a la gobernación en el 2024.
La tragedia que viven miles de personas en Puerto Rico que réplica el horror vivido cuando el huracán María, es el escenario perfecto para demostrar la necesidad urgente de liderato político que hace falta en nuestro país. Hace falta alguien que pueda mover a los políticos en la capital federal para agilizar el dinero y aguantar el caos en que arropa a esta la isla.
Hasta ahora, es ella la única que se percibe con algún nivel de liderato tanto entre la gente, como entre los políticos y con el imperio en Washington. Mucho más que el propio gobernador Pierluisi. Y sean estadistas o de otros partidos, es algo que hay que reconocer porque hasta los alcaldes populares la respaldan.
No es sólo eso, sino que también habrá que preguntarse si JGo brincará al Partido Demócrata. A todas luces, eso parece. Por sus acciones recientes, y por su distanciamiento a los republicanos que constantemente niegan ayudas hacia Puerto Rico, así se ve.
La comisionada ha procurado separarse del liderato republicano desde Trump para acá, sabiendo como el despliega aún hoy su desdén racista hacia los aborígenes caribeños que no hablan inglés – [que es como la mayoría de esos republicanos nos ve a nosotros]-, ese podría ser el caso. De suceder el brinco hacia los demócratas, esto también sería un momento histórico único la política puertorriqueña reciente.
Para los americanos ella sería una candidata “aliada” que es la única con opciones reales de triunfo electoral. En palabras sencillas, Pedro Pierluisi no tiene nada que buscar JGo lo reta en primarias.
Algunos dirán que por eso se casó recientemente, para ir preparando el camino a la gobernación. Pero en una entrevista que le hice hace más de 25 años, ella me había dicho a mí que “casarse de blanco en una iglesia católica”, era una de sus aspiraciones en la vida, así que no me sorprendió su boda.
Ese evento pre-Fiona, fue la comidilla por días y aquí nadie lo puede negar. Pero más allá de crear una imagen tradicional de “padre de familia, casado con 2.5 hijos y mascotas”, que en el caso de JGo es “casada y soon-to-be stepmother”, en la política todo es contexto. Hay que observar las acciones de la gente, el contexto político del momento, y las movidas de los que aspiran a ser candidatos. Ver como responden a sus respectivas realidades.
Ahora mismo, el gobierno federal debate si van a agilizar entregar o no las ayudas después de Fiona y los fondos para la reconstrucción de Puerto Rico después del huracán María, que han estado aguantados desde Trump y también bajo Biden.
El coraje de Trump con los puertorriqueños, la botada que le hizo el pueblo a Ricky Rosselló, el despilfarro de la Junta de Control Fiscal que nos espetó Obama (recordemos que fueron los demócratas) y la corrupción asqueante del Partido Nuevo Progresista son elementos que el mismo Trump denunció y que se mantienen en el desdén casi odio de muchos republicanos hacia los puertorriqueños. Los demócratas han intentado moverse para agilizar los procesos, pero también tienen sus dudas y ponen sus peros.
Por eso es que el sector privado tuvo que moverse directamente, “bypassing” como dicen en inglés, hasta el propio gobierno de Puerto Rico para exigir acción a la Junta y reunirse con los altos mandos en la Casa Blanca, como reportamos el jueves en entrevista con el presidente de la Cámara de Comercio, Cameron McKenzie.
Además, hay otras crisis bien cercanas. Una tiene que ver con la salud. El secretario Carlos Mellado se encuentra en Washington todos estos días cabildeando por más dinero, porque los republicanos no acaban de asignar lo que se necesita y quieren cortar los fondos federales. De ser así, el gobierno local y la Junta tendrían que sacar $1,250 millones que no los tienen. JGo no ha dicho mucho ni esta boca es mía de ese tema, porque también demuestra el maltrato de los republicanos hacia Puerto Rico.
Quizás ese silencio viene porque poco a poco, y desde hace tiempo, Jennifer González se ha ido distanciando del Partido Republicano. No podemos olvidar las múltiples humillaciones que le hizo Trump cuando era presidente, y ella se mantuvo callada. Cuando él la montó en su avión presidencial en María, y ella presenció cuando el entonces presidente americano empezó a tirar rollos de papel toalla, en esa icónica imagen de su desprecio hacia los puertorriqueños en general. JGo no votó por él como candidato en la convención republicana.
De hecho, JGo renunció a la presidencia de los republicanos en Puerto Rico y ese puesto entonces pasó al exrepresentante Ángel Cintrón. Después de eso, JGo no ha estado en la reorganización de los republicanos.
También se sabe que JGo se opone a posturas asumidas por los republicanos, como la eliminación del derecho al aborto, pero la evidencia más clara es el estatus.
El acercamiento más evidente hacia los demócratas se vio con lo que pasó con Nydia Velázquez. Dos archienemigas, supieron unirse para presentar un proyecto de estatus que realmente tenia las posturas de ambas. No significa que sean amigas, pero trabajaron juntas. Además, Raúl Grijalva ha ido acercándose a JGo y recientemente fue a la única republicana que invitó en un viaje a África para investigar el tráfico de animales exóticos a los Estados Unidos, según fuentes.
El que fue director de campaña para la Comisaria Residente en Washington, y su mano derecha, Francisco Domenech, es demócrata. ¿Es esa cercanía otra señal de un inminente cambio de partido?
A todo esto, también hay que añadir el coraje general que hay hacia la figura de Pierluisi. Su defensa de Luma, el hecho de que todo el mundo sabe que trabaja de lunes a viernes, que a la menor provocación se va los fines de semana a Republica Dominicana o a Virginia, y que su hermana Caridad y su cuñado Guillemard tienen influencias en el poder político, provocan encono en la gente.
Cuando pasó el huracán Fiona, la Comisionada cometió un error de felicitar a Manejo de Emergencias por un rescate de ciudadanos, que en realidad habían sido salvados por sus vecinos. La criticaron, pero ella rápido pidió excusas y el error quedó en el olvido. Esto significa que tiene unos apoyos que están ahí. Incluso, trascienden líneas partidistas porque hay alcaldes populares que son cercanos a ella.
A nivel electoral Jennifer González sabe cómo correr sus campañas y fue la que más votos sacó las contiendas electorales anteriores. Pero JGo tiene que contestar de manera contundente donde queda ella ante la corrupción que arropa al PNP con arresto tras arresto de lideres, convirtiéndolo en una organización criminal continua.
Así que venga o no venga con Biden en el avión presidencial, se meta o no a demócrata, la pregunta es: ¿Será Jennifer González la próxima candidata a la gobernación? Eso, el tiempo lo dirá.