San Juan, 8 nov (EFEUSA) – La organización Vapeadores Aliados por Puerto Rico ha querido recalcar este viernes, tras conocerse el primer caso sospechoso de daño pulmonar asociado con el uso de cigarillo electrónico reportado ayer por el Departamento de Salud de la isla, que el daño no viene causado por el uso del cigarrillo electrónico sino por la sustancia inapropiada que algunos consumidores introducen en el mismo.
En un comunicado expresaron su preocupación, de que se usen los términos «vapeo» y «cigarrillos electrónicos» para «correlacionarlos a condiciones pulmonares que han surgido en los últimos meses».
«Se siguen ignorando los múltiples estudios e investigaciones realizados por agencias gubernamentales como CDC y FDA, que han encontrado una relación directa entre estas enfermedades y el uso de drogas ilegales que se consumen vaporizando. En síntesis, nos preocupa que se continúe señalando al medio, en vez de a la sustancia», indicaron.
«No, no es lo mismo culpar a la acción de tomar que culpar al alcohol cuando hablamos de enfermedades en el hígado», subrayaron.
«Este uso inapropiado no tan solo desinforma a la ciudadanía, sino que también repercute en la salud pública. En Puerto Rico, miles de personas han cambiado el cigarrillo tradicional por el electrónico, habiéndose ya probado que este último es 95 por ciento menos dañino», indicaron.
Por otro lado, manifestaron que vapear «no promueve el uso de cigarrillos electrónicos entre los menores de edad. Incluso, estamos trabajando arduamente para emitir propuestas al Gobierno que fortalezcan la política pública de no vender tabaco a menores de edad».
En cuanto al caso reseñado ayer «queremos desearle una pronta recuperación a la joven. Lamentamos que el uso inadecuado del cigarrillo electrónico para el consumo de marihuana ilegal, por parte de la joven -según confirmó ayer el Departamento de Salud a algunos medios-, le haya provocado daños serios a su salud».
Este caso demuestra «lo que habíamos estado señalando, que las muertes y condiciones respiratorias graves asociadas al uso del cigarrillo electrónico, no tienen que ver con el medio, sino con la sustancia, en este caso, cartuchos ilegales de THC».
«Los cartuchos ilegales de THC son vendidos en la calle, y se manufacturan mediante procesos dudosos y no regulados. Esto incluye el uso de sustancias tóxicas que resultan perjudiciales a la salud», recalcaron.
Por último, remitieron a varios estudios realizados «por entidades reconocidas y agencias gubernamentales, que específicamente tratan sobre cómo los cigarrillos electrónicos son considerablemente menos perjudiciales que los cigarrillos tradicionales. También, se publican estudios de fuentes reconocidas sobre los riesgos de salud que acarrea el uso de cartuchos ilegales con aceite de THC».