San Juan, Puerto Rico (EFE) – El Servicio Nacional de Meteorología (SNM) de San Juan emitió este martes una advertencia de inundaciones urbanas y riachuelos para los municipios de Añasco, Cabo Rojo, Hormigueros y Mayagüez, al igual que de fuertes vientos por ráfagas que alcanzan las 50 millas por hora.
Según detalló el SNM en su más reciente boletín, el Radar Doppler registró una densa nube con fuertes tronadas cerca del municipio de Patillas que se movía hacia el noroeste a 55 millas por hora con ventarrones que podrían provocar la caída de ramas.
Ante todo ello, los alcaldes de Guayama, O’brain Vázquez Molina, y Peñuelas, Gregory Gonsález Souchet, exhortaron a los residentes de dichos municipios a estar atentos ante estas condiciones.
Según aseguraron, las brigadas municipales de Obras Públicas y la Oficina Municipal para el Manejo de Emergencias (OMME) de ambos municipios están listas para atender cualquier situación que pueda ocurrir.
En el caso de Guayama, el alcalde Vázquez Molina dijo que sus brigadas realizaron inspecciones a las alcantarillas y removieron material vegetativo, así como de otro tipo de basura que pueda obstruir las mismas.
Otras inspecciones que realizaron las brigadas municipales de Guayama incluyen los generadores eléctricos disponibles para validar que estén en óptimas condiciones.
Vázquez Molina adelantó que prestan atención especial a las carreteras PR-179 en la comunidad Carite, la carretera PR-712 en el Pueblito del Carmen y la Urbanización Villa Real, ya que son estas las zonas más vulnerables a inundaciones.
Para esto, el municipio compró una nueva bomba de succión de agua de cuatro pulgadas de diámetro que se suma a otras que compró el personal de la administración municipal hace alrededor de un año.
«Entendemos que con las bombas que tenemos disponibles y la nueva que llegó recientemente, podemos controlar las inundaciones que por décadas ocurren en la Urbanización Villa Real», aseguró.
Gonsález, por su parte, sostuvo que las brigadas realizaron las inspecciones correspondientes a través de las comunidades y prestaron atención especial a las alcantarillas.
«Los eventos de lluvia siempre nos preocupan por la cantidad de deslizamientos y derrumbes que ocurren en el pueblo. Por eso, durante todo el año las brigadas municipales realizan labores de limpieza en las vías de rodaje y en las comunidades», afirmó.
Gonsález mencionó que las carreteras PR-385 y PR-386 son las que más le preocupan debido a situaciones de emergencias ocurridas en las cuales hubo desprendimiento de rocas y terreno.