Por Sandra D. Rodríguez Cotto
En Blanco y Negro
GUAYNABO, Puerto Rico – Desde hace dos días, se ha movilizado un esfuerzo para que el Partido Popular Democrático (PPD) descalifique al aspirante al Senado, Wilfredo Díaz Rosado, por comentarios homofóbicos y posturas controvertidas. Ayer, tres mujeres del partido presentaron una querella que esperan sea evaluada mañana en la reunión del pleno. No obstante, Díaz Rosado se defiende alegando injusticia.
“Me tengo que defender porque esto es injusto. ¿Cómo me atacan sin siquiera escucharme?” manifestó Díaz Rosado a En Blanco y Negro cuando fue contactado. “Compartí una publicación para informar sobre el asesinato de un hombre vestido de mujer en Toa Baja. Fue simplemente un ‘copy-paste’ de algo que miles ya habían visto”.
Díaz Rosado, quien busca un escaño por el distrito de Bayamón con el PPD, generó polémica al saberse que fue uno de los muchos que en 2020 compartieron en redes sociales un post burlándose y acosando a la transgénero Neulisa Luciano Ruiz, conocida como Alexa. Las autoridades federales indicaron que este acoso en redes sociales precedió su asesinato en 2021.
Pero compartir ese comentario contra Alexa no es la única causa de la oposición a Díaz Rosado dentro del PPD. También se le critica por defender las políticas del expresidente republicano Donald Trump, por ser “anti-Biden” y anti-Partido Demócrata, por oponerse a la vacunación contra la COVID-19 y por haber promovido y votado en las elecciones de 2020 por la actual senadora del Proyecto Dignidad, Joanne Rodríguez-Veve.
“Si me destituyen, ¿qué voy a hacer? No puedo correr para ningún lado. Supongo que, entonces, apelaría. No soy una persona mala. No soy un asesino. No soy corrupto. No tengo antecedentes. Mis valores, inculcados por mis padres, me enseñaron a ser un buen puertorriqueño, a amar este país y a todos por igual,” expresó Díaz Rosado.
Ayer, el presidente del PPD, Jesús Manuel Ortiz, condenó y se distanció de las declaraciones de Díaz Rosado sobre Alexa, calificándolas de desacertadas. No descartó que el tema se discuta mañana lunes, 8 de enero, en la reunión de la Junta de Gobierno del PPD, donde se evaluarán tres casos pendientes sobre candidaturas: el del suspendido alcalde de Mayagüez, José Guillermo “Guillito” Rodríguez; el del precandidato a la alcaldía de Quebradillas, Radaí García Venegas; y el de Aymat Rivera para la alcaldía de Lajas. La reunión está programada para las 5:30 p.m. en la sede del partido en Puerta de Tierra.
RADICAN QUERELLA EN SU CONTRA
La exsenadora Margarita Ostolaza, Gretchen Coll y Tirzha Alcaide formalizaron ayer la querella contra Díaz Rosado, solicitando al PPD su descalificación. La querella argumenta que sus posturas van en contra de los valores del partido, la equidad de género, la crisis migratoria en los Estados Unidos, el cambio climático, la enfermedad del COVID-19 y que sus expresiones en redes sociales propagan desinformación.
“Además, ha expresado su inconformidad con el PPD cuando este ha adoptado posturas en favor de los Derechos Humanos, aprobadas en asambleas del partido, llegando a decir que este no lo representa”, se lee en la querella.
“Recomendamos no incluirlo en la papeleta electoral de noviembre”, concluye la querella.
Díaz Rosado, quien trabaja en la Oficina de Finanzas del Municipio de Toa Alta, dice que decidió postularse al ver de cerca las necesidades de la gente, lo que lo inspiró a buscar un escaño para mejorar la calidad de vida en el país.
“He atendido a tanta gente y he visto tantas necesidades, especialmente en ancianos solos y personas que llegan sin poder más. Por eso decidí entrar en la política pública. A pesar de que mi esposa no estaba de acuerdo, sabía que esto podría suceder”, dijo el aspirante.
SE DEFIENDE EL CANDIDATO
Díaz Rosado se describe como republicano-popular pro-Donald Trump, conservador, pro-familia y defensor de la Segunda Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos, que garantiza el derecho a poseer y portar armas. Cree en una unión permanente con los Estados Unidos, pero se considera un “popular machetero”, argumentando que es necesario “dar machete” para recortar gastos y eliminar oficinas gubernamentales innecesarias.
“Cualquier cosa que venga de los demócratas en Estados Unidos, no la creo”, afirmó. Además, sostiene que Trump es el único presidente que ha dicho la verdad a los políticos puertorriqueños, a quienes califica de corruptos. También admira a los presidentes de El Salvador, Nayib Bukele, y de Argentina, Javier Milei.
“Como dice Nayib Bukele: ‘cuando nadie roba, el dinero alcanza’, y el país está harto del robo. Si se administrara bien el dinero bajo el Estado Libre Asociado, estaríamos mejor. El Salvador es diferente a Puerto Rico, pero la política de Nayib Bukele ha cambiado positivamente ese país, por eso tiene un 94% de aprobación. Y miren lo que pasó recientemente en Argentina, que despertó. Sí, Javier Milei en Argentina tiene la motosierra, pero en Puerto Rico hay que sacar el machete para recortar. Hay que recortar oficinas inútiles que derrochan el dinero del pueblo. Tenemos que pensar en eso”, agregó.
Sobre el asesinato de Alexa, Díaz Rosado expresó que rechaza la transfobia y la homofobia, y que los ataques hacia su persona son injustos porque él no fue quien la asesinó.
CONTEXTO: SOBRE EL CRIMEN DE ALEXA
El brutal asesinato de Alexa es uno de los crímenes que más ha conmocionado a Puerto Rico, evidenciando hasta dónde puede llegar el odio, la homofobia y los prejuicios hacia las personas sin hogar.
Alexa, una transgénero sin hogar, utilizaba un espejo para mirar hacia atrás y ver si alguien la seguía. Solía caminar por Toa Baja y el 24 de febrero de 2020, día en que cumpliría 28 años, fue asesinada brutalmente en un paraje en la intersección de la carretera PR-165 con la PR-185 en Toa Baja.
Anthony Steven Lobos Ruiz, Jordany Rafael Laboy García y Christian Yamaurie Rivera Otero identificaron a Alexa por una publicación en redes sociales que la acusaba de haber entrado a un baño de mujeres en un restaurante de Toa Baja. Los tres hombres la persiguieron, la acosaron con insultos, incluyendo “la loca”, y luego la atacaron con pistolas de bolas de pintura (clasificadas como «armas peligrosas» según el código federal), en dos ocasiones.
Uno de los hombres grabó los ataques a Alexa, los publicó en redes sociales y luego borró los vídeos. Las autoridades federales acusaron a los tres de conspirar para cometer un crimen de odio, violar la ley de prevención de crímenes de odio y obstrucción a la justicia. Lobos Ruiz se declaró culpable en agosto de 2022 y fue sentenciado en noviembre a dos años y nueve meses de cárcel. Laboy García y Rivera Otero se declararon culpables.