Por Sandra D. Rodríguez Cotto
En Blanco y Negro con Sandra
San Juan, Puerto Rico – Sin cargos y por la puerta ancha. Así termina el caso federal que pesaba desde hace casi cinco años contra la exdirectora de la Administración de Servicios de Salud (ASES), Angie Ávila. Esto sucedió anoche cuando la Fiscalía federal solicitó al juez Pedro Delgado desestimar todos los cargos de corrupción que pesaban en su contra.
“¡Imagínate cómo me siento! Me enteré anoche. Son cuatro años de sufrimientos, cuando yo nunca hice nada malo. Yo siempre protegí los fondos federales, y eso lo dije desde el principio”, dijo Ávila a En Blanco y Negro con Sandra en una breve llamada telefónica.
Días antes del controversial Verano del 2019, un Gran Jurado acusó a Ávila Marrero por supuestamente participar en un esquema de fraude electrónico donde divulgó información confidencial de ASES para beneficiar a allegados.
Hoy está absuelta. Ávila comentó que se dirigía a hablar con su equipo legal, encabezado por el abogado Jason González Delgado, reconocido en el tribunal federal por ser uno de los miembros de la defensa del hoy convicto exboxeador Félix Verdejo. Desde hace meses En Blanco y Negro con Sandra solicitaba una entrevista con Ávila, pero había una orden de mordaza y el abogado no permitía intercambios. Hoy, sin embargo, la exfuncionaria se desahogó en una breve llamada telefónica con este medio, antes de reunirse con su abogado.
“Yo velé por hacer bien el trabajo, pero aquí hay unos intereses externos de gente que llega al Gobierno y que le hacen daño a las personas decentes, como me pasó a mí por tanto tiempo”, agregó Ávila. Expresó que ofrecería una entrevista con más tiempo, más adelante.
“Por ahora sólo te puedo decir a ti, con quien he hablado todos estos años, que sabes que esto ha sido un gran sufrimiento para mí y para mi familia, pero ya terminó. Es una pena que gente decente tengamos que pasar por estas cosas que le hacen tanto daño al Gobierno y al pueblo”, dijo Ávila, al tiempo en que solicitó espacio para hablar con sus abogados y más adelante ofrecer declaraciones.
Tanto la defensa como la Fiscalía federal solicitaron al juez federal Pedro Delgado desestimar todos los cargos que pesaban en su contra. La moción de desestimación de la Fiscalía federal cita el caso Ciminelli v. United States, que fue resuelto por el Tribunal Supremo de los Estados Unidos en mayo pasado, y que limitó el alcance del estatuto federal de fraude electrónico.
El caso de Ávila fue uno de los momentos más álgidos en la política puertorriqueña que tambaleó los cimientos del Gobierno y desestabilizó el país por mucho tiempo. El 9 de julio de 2019 publicamos las primeras páginas del infame chat de Telegram plagado de comentarios racistas y malos manejos del Gobierno por parte del exgobernador Ricky Rosselló y sus “Brothers”, que desembocó en las protestas y su renuncia en el Verano del ’19.
Pero un día después de esas primeras publicaciones, el 10 de julio de 2019, se jamaqueó el Gobierno con los arrestos hechos por autoridades federales a Ávila junto a la entonces secretaria de Educación, Julia Keleher, y dos de los más cercanos colaboradores del gobernador Rosselló, los contratistas Alberto Velázquez Piñol y Fernando Scherrer, de la firma de consultoría BDO. También fueron detenidas ese día las hermanas y contratistas; Glenda y Mayra Ponce Mendoza.
Keleher, Ávila, Velázquez Piñol y Scherrer fueron acusados por fraude electrónico y lavado de dinero, entre otros cargos. Keleher enfrentaba siete cargos incluidos conspiración para cometer fraude electrónico, cinco de fraude electrónico, uno de conspiración para cometer un delito contra los Estados Unidos.
Hace tres meses, para agosto pasado en En Blanco y Negro cuestionábamos qué había pasado con los casos federales de Ávila y Velázquez Piñol porque habían pasado casi cuatro años desde el arresto federal. Esta duda surgía cuando se comparaba con lo que pasaba con Keleher.
La que fue llamada “secretaria estrella” y cerró cientos de escuelas, desplazando comunidades, sólo cumplió unos seis meses de cárcel y salió. Hace unos meses se anunció que fue nombrada la nueva directora ejecutiva de las organizaciones First State Educate (FSE) y First State Action Fund en Delaware. En agosto en este medio dimos a conocer que Keleher y el expresidente del Senado, Eduardo Bhatia, anunciaban que participarán en marzo del 2024 en un foro en los Estados Unidos para “mejorar la educación en Puerto Rico”.
Antes de dirigir ASES, Ávila trabajó en distintos puestos en esa dependencia desde 1997. Fue directora de Finanzas, administradora de Análisis y subdirectora ejecutiva. Previo a su trabajo en ASES, fue contralora para el National Health Care Center en Guaynabo donde fue responsable de todas las operaciones administrativas y financieras, establecer las políticas y el manejo del personal de la empresa. Más adelante, fue nombrada Directora Ejecutiva para la clínica ambulatoria Pavía en Santurce.