San Juan (EFE) – El Negociado de Energía emitió este jueves una resolución que autorizaría enmiendas al contrato de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) con AES, la empresa privada dueña de la planta generatriz a base de carbón de Guayama.
Según recoge el comunicado del Negociado de Energía, la autorización de las enmiendas tiene un impacto de unos $185 millones en la factura de los abonados durante los próximos cuatro años.
Dichas enmiendas al contrato fueron propuestas luego de que AES alegara que varios cambios en el ordenamiento jurídico de Puerto Rico aumentaron los costos de operación de la planta.
De igual forma, AES alegó que el contrato existente no le permitía recuperar los gastos necesarios de operación de la planta dados los niveles de eficiencia térmica (heat rate) a los que corre la planta.
En su resolución, el Negociado concluyó que, si AES dejara de operar en el corto plazo producto de la insolvencia de la empresa, el costo para los abonados de la AEE alcanzaría un total de $900 millones durante los próximos cuatro años en gastos adicionales producto de la necesidad de quemar combustibles más caros.
En cambio, la autorización de las enmiendas, aunque aumenta el costo de esta operación para los abonados, implica un cambio menor de $185 millones durante el mismo periodo de cuatro años, indicó el Negociado.
El Negociado también señaló que, de producirse un retiro temprano de la planta de AES, habría un déficit adicional de reserva de generación hasta al menos finales del 2027 y aumentaría la tasa de expectativa de relevos de carga.
Además, determinó que es razonable permitir un ajuste en el contrato para reflejar un aumento en el «heat rate», pero insistió en que cualquier incremento debe mantenerse dentro del promedio de la industria de los últimos cuatro años, es decir, 10,620 Btu/kWh neto.
El ajuste aprobado al «heat rate» para el cálculo de pagos por combustible resultará en ahorros estimados de $35.23 millones para los abonados en el periodo de 2024 a 2027 en comparación con el propuesto por la AEE.
El Negociado también reconoció en su resolución que las enmiendas propuestas por la AEE eran necesarias debido a cambios en las leyes vigentes que regulan aspectos importantes de la operación de AES en Puerto Rico como las prohibiciones en cuanto al uso, manejo y disposición de cenizas.
No obstante, el Negociado rechazó, en este momento, cambios al contrato que le habrían dado a AES términos preferenciales, más allá de los que se otorgan en la Ley de Política Pública Energética de Puerto Rico (Ley 17-2019), y el derecho de desarrollar hasta 300 MW de capacidad de generación de fuentes renovables.
Al respecto, sí avaló que se continúe una negociación de buena fe entre las partes, enfatizando que cualquier acuerdo debe establecer que la generación renovable estará disponible en o antes del 31 de diciembre del 2027.