Por Sandra Rodríguez Cotto
En Blanco y Negro con Sandra
San Juan – El temible narcotraficante y gángster que fingió ser un millonario filántropo y apicultor, y que se paseaba constantemente entre empresarios de la Ley 60 (antes 20-22), políticos de los partidos Nuevo Progresista y Popular Democrático, y visitaba La Fortaleza, será finalmente extraditado a Canadá esta semana.
Connor Vicent D’Monte, quién se hizo pasar por un empresario con el nombre de Johnny Williams o «Johnny el Americano» finalmente será extraditado después de casi un año encarcelado en la prisión federal en Guaynabo, confirmó En Blanco y Negro con Sandra mediante entrevistas a varias personas de su equipo legal, amistades y extranjeros que viven en Puerto Rico.
El pasado 27 de enero hubo una vista de extradición en el Tribunal Federal y se supone esta semana se determine finalmente cuando tendrá que rendir cuentas ante las autoridades canadienses, que le imputan cometer y ordenar varios asesinatos e intentos de asesinato a rivales, trasiego de drogas y otros delitos.
Así lo confirmaron su abogada a nivel estatal, Yaliz «Yaya» Báez; el estadounidense vinculado a la empresa que D’Monte representaba, Karma Honey Project y a otras entidades locales, Michael «Matt» Scadden; y la periodista canadiense Kim Bolan. El magistrado federal Marshal D. Morgan dijo en el fallo de cuatro páginas que el gobierno canadiense había presentado material en el caso contra D’Monte que cumplía con el umbral para la extradición según el tratado entre Estados Unidos y Canadá.
“Hay causa probable para creer que el fugitivo ante este tribunal es la misma persona identificada en la solicitud de extradición del Gobierno de Canadá, cometió los delitos por los que se solicita la extradición”, dijo Morgan. “La evidencia ante este tribunal es suficiente para justificar el enjuiciamiento del fugitivo por cargos de delitos graves”.
Peligroso gángster
Oriundo de Vancouver, D’Monte fue acusado en enero de 2011 de asesinato y conspiración en la ejecución de su rival Kevin LeClair ocurrida en el 2009, y por el complot más amplio entre 2008 y 2009 para asesinar a Jonathan, Jarrod y Jamie Bacon, así como a otros miembros de la ganga de narcotraficantes internacionales Red Scorpions.
El año pasado la periodista Bolan confirmó esos hechos. En la cobertura de ese juicio se enteró que ella misma estaba en una lista de las personas a quien D’Monte ordenó ejecutar, según narró en sendas entrevistas que publicamos en este medio y en el programa de radio.
Pero referente a la audiencia del pasado enero 27, el fiscal federal adjunto Julian Radzinschi le dijo a Bolan que D’Monte no solo conspiró para matar a los Bacon y sus asociados, sino que también fue parte de la cacería e incluso aportó parte del dinero de la recompensa.
Radzinschi además dijo que la oferta de extradición provista por el gobierno de Canadá en abril pasado incluía evidencia “considerable” que implicaba a D’Monte tales como su ADN, vídeos y fotografías de vigilancia, así como declaraciones de testigos de sus exsocios convertidos ahora en testigos del tribunal canadiense.
“Las declaraciones de los testigos colaboradores que se encuentran en la declaración jurada de los hechos y se corroboran en parte del material interno acumulado en la investigación”, dijo el fiscal en esa entrevista, mientras el propio D’Monte escuchaba dentro de la sala del tribunal.
El fiscal federal describió el sangriento conflicto entre las gangas Red Scorpions y la ONU antes y después de que el fundador de la ONU, Clay Roueche, fuera arrestado en los Estados Unidos en mayo de 2008. Más tarde fue condenade por tráfico de drogas y lavado de dinero, y hoy cumple una condena de 24 años.
“Después de ese arresto, según indicaron los testigos cooperadores, el prófugo (D’Monte) fue elegido líder de la banda de la ONU. Como jefe de la pandilla de la ONU, el fugitivo podía decidir quién era asesinado y empujaba a los pandilleros de la ONU a ‘atrapar’ a los hermanos Bacon”, dijo Radzinschi a Postmedia.
El abogado de D’Monte, Andrew McCutcheon, reafirmó su argumento en la audiencia del 27 de enero de que el fugitivo debería poder revisar la evidencia real recopilada en su contra en lugar de confiar en una declaración jurada del detective Terrence Murphy resumiendo el caso. El magistrado federal Morgan falló en contra de la solicitud de descubrimiento anterior de McCutcheon en octubre de 2022.
No fue posible contactar a McCutcheon antes de la publicación de este artículo, pero en el tribunal ese día dijo que: “Nuestra opinión es que la introducción de resúmenes de información a través de una declaración jurada de un oficial de policía es insuficiente para cumplir con las exigencias del tratado (de extradición)”.
Morgan rechazó la posición de la defensa y ordenó que D’Monte, quien ha estado bajo custodia desde su arresto, sea entregado a los alguaciles de Estados Unidos «en espera de una nueva decisión sobre extradición y entrega por parte del Secretario de Estado».
Relaciones en Puerto Rico
La historia de D’Monte parece una trama de una película. Huyó de una vida de narcotraficante, estuvo en México, Filipinas, Hong Kong, donde su ganga tenía relaciones, y de pronto apareció en Puerto Rico como un filántropo del “jet-set” que solía ir a la playa en Isla Verde o a restaurantes exclusivos. Así se codeó con muchos millonarios que llegaban atraídos por la Ley 20-22, y con políticos a los que les recaudaba fondos y con quienes tenía contacto directo.
Esta noticia inició con la publicación de un chat En Blanco y Negro, en el que D’Monte solía comunicarse casi a diario con el secretario del PNP, el senador Carmelo Ríos, y con el alcalde PPD de Río Grande, Ángel “Boris” González. Mantuvo también contacto con la alcaldesa de Canóvanas, Lornna Soto, y más constantemente, con el represente Eddie Charbonier, entre otros, para recaudarles fondos.
También mantuvo reuniones sobre apicultura con el secretario de Agricultura, Ramón González Beiró y con el senador Javier Aponte Dalmau. Incluso llegó hasta acudir a La Fortaleza para un evento con el gobernador Pedro Pierluisi acerca de unas colmenas urbanas. De La Fortaleza primero lo negaron, pero luego aceptaron que estuvo incluido en el comunicado de prensa.
D’Monte se proyectaba como millonario, que quería invertir en obras de arte y en arte digital en la tecnología blockchain (NFT). Otras veces, decía ser un filántropo y engañó al ahora un líder comunitario de Cubuy, Canóvanas, Javier Valedón, conocido porque en el pasado trabajó con el locutor Molusco. D’Monte lo convenció para que le cediera espacio en una escuela, de las que había cerrado la exsecretaria de Educación, Julia Keleher, y Valedón usaba como comedor social.
Pero múltiples empresarios del sector de Ley 20-22, quienes no quisieron decir sus nombres por temor a represalias, dijeron que D’Monte los engañó. Uno de estos fue Scadden, quien dijo que ha querido que Karma Honey Project se mantenga operando “porque hizo mucho bien por Puerto Rico”.
“Cuando él fue arrestado yo lo ayudé porque lo conocía como Johnny. Me hice cargo de sus “affairs” (asuntos) y resolver cosas como contacto entre él y sus amistades, pero yo no sabía nada de lo que se le imputaba”, dijo la licenciada Báez, quien todavía se mantiene como su contacto local ante las autoridades federales. A nivel federal, D’Monte tiene otro abogado, pero Báez dijo que no mantienen comunicación.
Cuando pasó el huracán María el sector de apicultura que es vital para el desarrollo agrícola por poco desaparece, y varios apicultores reclamaban atención del Gobierno. Unos proyectos y escuelas que se iban a desarrollar de momento pasaron a ser dirigidos por estadounidenses que venían como voluntarios. Uno de estos fue Karma Honey Project, en el que D’Monte se presentaba como presidente. Según el Registro de Corporaciones, esa empresa reportó ganancias de sobre $3 millones, sin activos ni pasivos.
Sin embargo, el negocio supuestamente era de Candice Galek, quien vivía en el estado de la Florida. En una entrevista en el programa de radio, ella intentó distanciarse de D’Monte, pero en la investigación realizada por este medio resultó que ella mantuvo una relación sentimental con D’Monte por años. Desde entonces, Galek está desaparecida.
En febrero del 2022 y tras el arresto de D’Monte, el secretario de Hacienda, Francisco Parés, dijo que investigaría a la empresa Karma Honey Project, y que la empresa se arriesgaba a perder el decreto contributivo, pero hasta el momento no ha expresado nada más.