Juan Saca, presidente de la empresa, aseguró que están preparados para responder a la emergencia, pero reconoce la fragilidad del sistema eléctrico tras el paso del huracán María
San Juan, Puerto Rico – Ante la inminente llegada de la tormenta tropical Ernesto, Puerto Rico se prepara para posibles interrupciones en el servicio eléctrico, un temor que persiste en la memoria colectiva desde el colapso del sistema tras el devastador huracán María en 2017. El presidente y CEO de LUMA Energy, Juan Saca, reiteró hoy que las interrupciones de servicio serán inevitables, pero aseguró que la empresa está lista para enfrentar la emergencia.
De hecho, el ejecutivo aseguró que la empresa que dirige no se va a “colgar” con su respuesta a la emergencia.
«LUMA no se va a colgar, LUMA está listo a responder. Es evidente, si hacen una investigación alrededor del mundo, saben que vientos de 50 millas por hora afectan cualquier sistema»,’contestó Saca a preguntas de periodistas durante la conferencia de prensa de la administración de Pedro Pierluisi.
Sin embargo, Saca reiteró hoy que las interrupciones de servicio por el paso de la tormenta son seguras e inevitables.
«Va a ser muy difícil que no existan interrupciones de servicio, porque sí las va a haber. Lo importante es que todos entendamos y sepamos eso. Pero LUMA está preparada para responder», afirmó Saca en una conferencia de prensa.
Según detalló, la empresa cuenta con un inventario de $250 millones en 11 almacenes distribuidos por toda la isla, además de 1,536 profesionales de campo y un centro de llamadas que opera las 24 horas del día con 246 personas listas para atender emergencias.
No obstante, Saca reconoció que el sistema eléctrico de Puerto Rico sigue siendo frágil, una condición que ha persistido desde el colapso masivo que dejó a la isla en la oscuridad tras el huracán María. A pesar de los esfuerzos de modernización y automatización que LUMA ha intentado implementar desde que asumió el control del sistema en 2021, los apagones siguen siendo una preocupación constante para los puertorriqueños.
La situación se ha vuelto particularmente delicada con la llegada de Ernesto, cuyos vientos sostenidos de hasta 60 millas por hora podrían comprometer aún más las líneas de transmisión y distribución, que ya son vulnerables debido a la vegetación que las rodea. Saca recordó el impacto que los vientos tuvieron durante la tormenta Beryl en Houston, advirtiendo que algo similar podría ocurrir en Puerto Rico.
Por otro lado, el Departamento de Asuntos del Consumidor (DACO) también se mantiene en alerta, confirmando que hay suficientes abastos de combustible para enfrentar la emergencia. Según el secretario interino de DACO, el licenciado Francisco González de la Matta, hay un promedio de 37 días de suministro de gasolina regular, 40 días de gasolina premium y 38 días de diésel. «Estamos pendientes a cualquier situación que pudiera surgir, pero estos números nos dan indicios de que hay abastos suficientes», aseguró González.
Mientras tanto, el gobernador Pierluisi ha insistido en la importancia de mantenerse preparados y seguir las instrucciones de las autoridades.