Por Sandra D. Rodríguez Cotto
Especial para EyBoricua
San Juan, 24 de junio – Mientras los republicanos en el estado de Texas presionan por la celebración de un referéndum sobre una posible independencia de los Estados Unidos, los usuarios de las redes sociales sugirieron una idea: cambiar Texas por Puerto Rico.
Aunque la Constitución de los Estados Unidos no contempla la secesión, el Partido Republicano de Texas incluyó la medida en una plataforma partidaria propuesta por la que votaron los delegados en su convención estatal la semana pasada, reveló la revista Newsweek ayer.
La medida pide a la Legislatura de Texas que apruebe un proyecto de ley en su próxima sesión que permita un referéndum en 2023 para que «el pueblo de Texas determine si el estado de Texas debe o no reafirmar su condición de nación independiente». Expertos entrevistados por Newsweek dijeron que la probabilidad de que Texas se separe de los Estados Unidos es muy poco probable.
Aun así, algunos cibernautas en las redes sociales acogieron con beneplácito la idea de la secesión de Texas y sugirieron que podría brindar una oportunidad para que Puerto Rico y Washington, D.C. obtengan la estadidad.
«Dejemos ir a Texas y traigamos a Puerto Rico y DC», escribió un usuario de Twitter, obteniendo más de 17,000 “likes” (me gusta). Pero una organización que cabildeaba para que Puerto Rico se convirtiera en un estado, argumentó que la estadidad puertorriqueña no debería basarse en las decisiones de ningún otro estado.
«El Congreso debería ofrecer a los ciudadanos estadounidenses de Puerto Rico la admisión como estado basándose en el hecho de que la mayoría de los votantes de la isla han elegido repetidamente la estadidad en las urnas, no en la posibilidad de que las personas en cualquier otro estado estén considerando la secesión que, en la medida de lo posible, que yo sepa, no está permitido por la Constitución de los Estados Unidos», dijo George Laws García, director ejecutivo del Puerto Rico Statehood Council.
«No nos hacemos de ilusiones sobre la posibilidad de que Texas realmente se separe de la Unión y luego Puerto Rico los reemplace como estado, pero tenemos una esperanza genuina de que el Congreso finalmente responda a los votantes en Puerto Rico que exigen democracia plena, igualdad y derechos de voto a través de la estadidad», agregó.
Puerto Rico ha realizado varios referéndums sobre la estadidad, el más reciente en noviembre de 2020, cuando el 52.5% de los votantes dijo que la isla debería convertirse en el estado número 51 de la nación estadounidense. Esa elección no fue vinculante ya que sólo el Congreso puede cambiar el estatus político de la isla y jamás lo ha permitido en 124 años de coloniaje.
El mes pasado, un grupo de legisladores estadounidenses dio a conocer un proyecto de ley que proponía realizar un plebiscito vinculante en noviembre de 2023 para permitir que los puertorriqueños decidan su futuro. La Ley del Estatus de Puerto Rico, (Puerto Rico Status Act) es un proyecto de ley en consenso alcanzado entre ciertos congresistas ofrece tres opciones para Puerto Rico: convertirse en un estado, volverse completamente independiente o ser independiente en libre asociación, manteniendo algunos vínculos con los Estados Unidos. Hay pocas posibilidades de que el proyecto prospere.