Miguel Ángel Nieves Domínguez inicia sus estudios para el grado de Juris Doctor como parte de un innovador acuerdo entre la UPR y el Departamento de Corrección y Rehabilitación
San Juan, Puerto Rico – La Universidad de Puerto Rico (UPR), Recinto de Río Piedras, y el Departamento de Corrección y Rehabilitación (DCR) han marcado un hito en la educación y rehabilitación con la admisión de Miguel Ángel Nieves Domínguez en la Escuela de Derecho. A partir de este semestre, Nieves Domínguez comienza su camino hacia el grado de Juris Doctor, en el marco de un acuerdo histórico entre ambas instituciones destinado a ofrecer oportunidades académicas a personas privadas de libertad.
La rectora del Recinto de Río Piedras, Dra. Angélica Varela Llavona, celebró este avance como un paso crucial hacia la transformación y rehabilitación de individuos en confinamiento.
«Este acuerdo no solo reafirma nuestro compromiso con la justicia social, sino que también abre nuevas puertas de esperanza y oportunidades para aquellos que buscan rehabilitarse y reintegrarse en la sociedad», afirmó.
Nieves Domínguez, quien previamente se graduó Magna Cum Laude en el programa de Estudios Generales y realizó estudios en la Maestría en Administración y Gestión Cultural, ahora cumple su sueño de estudiar Derecho. Su trayectoria incluye una destacada participación en el programa Enlace con Escuelas Públicas y la realización del examen LSAT, que le permitió ser admitido en la Escuela de Derecho en agosto de 2024.
La decana de la Escuela de Derecho, Vivian I. Neptune Rivera, resaltó el impacto de la educación en la rehabilitación.
«Miguel es un claro ejemplo del poder de la educación en la rehabilitación. Su aspiración a ser miembro de la profesión legal y su compromiso con el acceso a la justicia reflejan sus sueños de contribuir a una sociedad más justa e inclusiva», comentó.
Por su parte, la secretaria del DCR, Ana Escobar Pabón, destacó la importancia de la admisión de Nieves Domínguez.
«Esta admisión es prueba de que la educación puede transformar vidas. La educación libera y ofrece oportunidades incluso en confinamiento. Agradecemos a la UPR por continuar el apostolado del sacerdote Fernando Picó», expresó.
El acuerdo entre la UPR y el DCR, vigente hasta julio de 2029, también contempla la admisión de dos estudiantes adicionales en 2025 y 2026, siempre y cuando se cumplan los requisitos aplicables. Esta colaboración destaca el compromiso de ambas instituciones con la rehabilitación social y el acceso a la educación superior.
La profesora Edna Benítez Laborde, coordinadora del Programa de Estudios Universitarios para Personas Confinadas, celebró este logro como un fruto valioso de años de trabajo.
«La presencia de Miguel en la Escuela de Derecho no solo marca un avance para él, sino que también simboliza la transformación necesaria en la educación jurídica y la práctica legal», concluyó.
El presidente de la UPR, Dr. Luis A. Ferrao Delgado, subrayó la importancia de este avance. «La admisión de Miguel Ángel no solo abre nuevas oportunidades para él, sino que también reafirma nuestro compromiso con la justicia y la inclusión. A través de este acuerdo, estamos fomentando el acceso a la educación y ofreciendo una segunda oportunidad para aquellos que buscan reinsertarse y contribuir positivamente a nuestra sociedad», dijo.
Para obtener más información sobre el Programa de Estudios Universitarios para Personas Confinadas, puede visitar el sitio web de la UPR o contactar a la oficina del DCR.