San Juan (EFE) – El gobernador Pedro Pierluisi y la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA) anunciaron este viernes un acuerdo para adquirir generadores eléctricos temporeros con los que estabilizar el sistema eléctrico de Puerto Rico.
Mediante la Sección 428 de la Ley Stafford, el programa de Asistencia Pública de FEMA proporcionará fondos para la adquisición de las unidades de generación temporera en Palo Seco y San Juan, junto con su infraestructura asociada.
«Este acuerdo es una gran noticia para nuestro pueblo porque nos permite fortalecer la estabilidad de nuestro sistema energético, al tiempo que podemos continuar con los trabajos de reparación, mantenimiento y reconstrucción de nuestra infraestructura eléctrica», dijo Pierluisi en un comunicado.
Según explicó el gobernador, FEMA proveerá los fondos para adquirir estas unidades sin que esto tenga un impacto en los fondos ya asignados a Puerto Rico para la reconstrucción de la red eléctrica y las reparaciones de las unidades generatrices.
La asesora principal de FEMA para el Grupo de Trabajo de Estabilización del Sistema Eléctrico de Puerto Rico, Nancy Casper, explicó que «el nivel actual de inestabilidad de la red simplemente no existía cuando se desarrollaron los proyectos de recuperación del huracán María» en 2017.
«Nadie podría haber anticipado los impactos en cascada que la tormenta causó a todo el sistema. FEMA reconoce el uso de estas medidas inmediatas como un paso hacia sistemas energéticos más sostenibles», agregó.
Ahora, con el apoyo del Gobierno federal, Puerto Rico está en una posición única para adquirir estas unidades de generación y utilizarlas hasta el 31 de diciembre de 2025, hasta que se completen las reparaciones y reemplazos programados.
Por su parte, el director ejecutivo de la Oficina de Recuperación, Reconstrucción y Resiliencia (COR3, por sus siglas en inglés), Manuel Laboy Rivera, destacó que estos generadores de 350 megavatios dan «estabilidad y confiabilidad al sistema» mientras se realizan los proyectos de reconstrucción permanente.
Estos generadores, que utilizan gas natural licuado (LNG, en inglés), son más favorables al medioambiente que muchos de los generadores actuales que usan diésel, produciendo menos contaminación y gases de efecto invernadero.
Además, requerirán menos reparaciones y mantenimiento, lo que reducirá las posibilidades de apagones. Esto también permitirá a Puerto Rico aprovechar tecnologías más nuevas y limpias en el futuro.
Mantener esta capacidad de generación temporal es fundamental para reducir la posibilidad de que se produzcan cortes de energía imprevistos mientras se realizan las reparaciones permanentes del sistema.