Por Esther Alaejos
Agencia EFE
San Juan, Puerto Rico – Jessica Fuentes, directora ejecutiva de la Red Nacional de Albergues de Violencia de Género de Puerto Rico, reclama en una entrevista con EFE al Gobierno «un plan de país» para atender a las supervivientes de esta lacra en la isla, donde los feminicidios siguen en aumento.
Fuentes hace hincapié en que «el Estado no tiene ningún albergue» y que son «las organizaciones quienes están resolviendo y atendiendo esta situación de violencia de género».
«No son considerados como servicios esenciales, así que cada albergue hace su trabajo de manera independiente para poder hacer llegar esos recursos, además del trabajo que hace la red», explica la directora de esta red compuesta por nueve albergues de atención a las supervivientes y a sus hijos.
La Red Nacional de Albergues de Violencia de Género, tras analizar las necesidades de las víctimas y sus familiares, se encarga de brindarles protección, alimentación, hogar transitorio o permanente y apoyo psicológico en la isla caribeña.
«Nosotras apostamos a que se realice un plan de país donde se pueda dar una respuesta coordinada y de acogida a los y las sobrevivientes de violencia de género», propone Fuentes.
La encargada de dirigir la red matiza que «debe ser un trabajo continuo y no una respuesta a cuando ocurre un feminicidio, debe ser algo constante».
Incremento de feminicidios La Policía de Puerto Rico informó que en 2023 se produjeron un total de 39 feminicidios, de los cuales 19 fueron por violencia de género.
Mientras, en lo que va de 2024, se reportaron 21 feminicidios, siete de ellos íntimos, según la Policía, unos datos que el Observatorio de Equidad de Género de Puerto Rico elevó a 32 casos, de los cuales ocho íntimos.
«Esto ocurre a pesar de la Declaración de Emergencia y si funcionó o no la declaración es difícil definir porque son varios factores», apunta Fuentes, que precisa que una de las causas de este incremento son las armas.
El gobernador puertorriqueño, Pedro Pierluisi, firmó a finales de diciembre una orden ejecutiva para extender la Declaración de Emergencia por Violencia de Género, que se decretó en 2021, hasta el 31 de diciembre de 2024, ante las alarmantes cifras de feminicidios.
«Normalizamos patrones y entonces hasta que no haya un nivel de consciencia de lo que realmente es la violencia y cómo se manifiesta en sus diferentes tipologías, no vamos a poder entender que existe una problemática real de violencia de género», explica Fuentes.
Educación como antídoto a esta lacra En el marco de la campaña educativa «Libros infantiles para hombres», la red presentó una guía ilustrada llamada ‘El libro del consentimiento para hombres’, compuesto de ilustraciones inspiradas en libros infantiles para que lo puedan comprender lectores de cualquier edad.
«Se plantean ejemplos básicos que ocurren en la cotidianidad de nuestras relaciones. Por ejemplo, es importante que sepamos que el consentimiento es como una licencia que tú tienes que ir renovando constantemente para saber si realmente esta persona o esta pareja está consintiendo el acto», indica Fuentes.
Además, el documento insta a los hombres a tomar acción para prevenir la violencia sexual y doméstica.
«No es una lucha de sexos, al contrario, es para promover la convivencia sana, la convivencia segura, y que igualmente podamos promover relaciones seguras, donde la violencia no sea un detonador dentro de ellas», aclara Fuentes.
«Esto va a requerir muchos años de prevención y de educación para poder entonces construir nuevos patrones donde fomentemos relaciones saludables», sentencia.