San Juan, 10 de septiembre de 2021 (EFE) – Funcionarios de la Oficina de la Contralora de Puerto Rico allanaron este viernes las oficinas de la alcaldía de Cataño, en las que se llevaron varios ordenadores como parte de una investigación bajo la administración del alcalde del municipio costeño, Félix «El Cano» Delgado.
Según dijo a varios medios locales la contralora, Yesmín Valdivieso, la pesquisa es producto de la búsqueda de evidencia para finiquitar una investigación por irregularidades en desembolsos de dinero bajo la administración de Delgado.
«Nosotros estamos llevando a cabo la auditoría que nos requiere el Código Municipal y dentro de la auditoría se encontraron unos desembolsos que se han estado investigando y entendimos que era necesario incautar dos computadoras para finiquitar la investigación y determinar si debemos hacer algún referido a algunas de las entidades de requerimiento», explicó Valdivieso.
Descartó, sin embargo, que las computadoras fueran ocupadas de la oficina del alcalde.
Afirmó, a su vez, que la investigación en desarrollo no tiene a Delgado como figura principal de la pesquisa.
«Él como autoridad nominadora y alcalde siempre es responsable de todo lo que pasa en el municipio, pero ahora mismo esta investigación no va directamente con el alcalde», acotó la contralora.
Valdivieso indicó, además, que los desembolsos bajo investigación no están relacionados al contrato de una guagua de lujo que alquiló el alcalde a razón de $4,500 mensuales.
«No te sé decir si hay fondos federales envueltos, pero son desembolsos que entendemos que hay irregularidades envueltas. Al fin y al cabo, ya determinaremos si esto es un señalamiento administrativo o si, en efecto, ha habido la comisión de algún delito», abundó Valdivieso.
REACCIONA EL ALCALDE
El alcalde, por su parte, compartió en las redes sociales que el allanamiento que realiza la Contraloría es «parte de sus procesos de auditorías rutinarias en los municipios».
Añadió que «como parte de esa autoría, personal de esa oficina requirió acceso a dos computadoras de la Oficina de Administración. Como ha sido costumbre de esta administración, se ha atendido con premura y diligencia todas sus peticiones».
«Es importante que se entienda que lo anterior no constituye una acusación contra nadie y es parte como se nos ha indicado del proceso de autoría», concluyó.