San Juan (26 de mayo de 2021) EFE – La Contraloría de Puerto Rico informó este miércoles que una auditoría suya reveló que el Municipio de Manatí tuvo varios fallos fiscales y administrativos, emitiéndole así una opinión cualificada.
Una opinión cualificada se emite cuando los incumplimientos individuales o en conjunto son significativos, pero no generalizados, explicó la Contraloría en un comunicado de prensa.
Dentro de las fallas administrativas revelados en la auditoría, el informe detalla el Municipio de Manatí no obtuvo el permiso de construcción para las mejoras realizadas en los centros Head Start La Fuente en Florida y Enrique Zorrilla en Manatí.
Según se informó, el Municipio de Manatí recibe y administra los fondos, como agencia delegada del Programa Head Start y Early Head Start en Florida, Ciales y Manatí.
Las mejoras de estos centros, junto al centro La Cumbre en Ciales, sumaron $336,636.
El secretario auxiliar de la Oficina de Gerencia de Permisos (OGPe) confirmó que ciertos trabajos realizados en los centros, requerían un permiso de construcción.
Esta situación, contraria a la ley y la reglamentación vigente, no permitió a la OGPe ejercer su función fiscalizadora y pudo tener consecuencias adversas para el Municipio y los usuarios del proyecto.
La auditoría de dos hallazgos señala que un empleado del Municipio que no era ingeniero licenciado, realizó múltiples tareas que se debieron encomendar a un ingeniero licenciado, tales como evaluación de estructuras, aprobación de órdenes de compra e inspecciones finales.
El informe detalla también irregularidades cometidas por el presidente de la corporación contratada para realizar trabajos de remodelación en el centro Head Start de Ciales.
Esta persona, que se identificó como ingeniero licenciado en varias cotizaciones, declaraciones juradas y en un contrato, tenía su colegiación como ingeniero en entrenamiento (EIT), suspendida desde el 2001 y no había renovado su licencia de EIT en la Junta Examinadora, vigente hasta el 1 de noviembre de 2004.
Además, los auditores de la Contraloría identificaron que la mencionada corporación, que también tenía un contrato con el Municipio de Barceloneta, informó en sus nóminas de empleados, que dos carpinteros y dos trabajadores, habían trabajado de forma simultánea en dos proyectos o sea 16 horas diarias.
Esto representó 536 horas por empleado para un total de 2,680 horas por $26,864.
No obstante, la corporación no informó los salarios de estos empleados al Departamento del Trabajo y Recursos Humanos (DTRH) en el 2018.
Esta situación se refirió a la Oficina del Inspector General del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos el 12 de marzo de 2020.
El informe también recomienda al secretario de Justicia y al secretario del DTRH considerar esta situación para que determinen las acciones a seguir.
El Municipio de Manatí invirtió también $366,591 en proyectos que no han tenido utilidad por estar detenidos por la situación fiscal del Banco Gubernamental de Fomento.