Informe señala deficiencias en compras, control de bienes y cumplimiento de normativas
San Juan (EFE) – La Oficina del Contralor de Puerto Rico (OCPR) emitió este jueves una opinión cualificada de las operaciones fiscales de la Superintendencia del Capitolio Estatal de la Asamblea Legislativa de Puerto Rico.
El informe revela deficiencias relacionadas con la solicitud, adquisición y recibo de bienes y servicios mediante órdenes de compra.
De la muestra examinada, el 15% incluía cotizaciones recibidas antes de elaborar los formularios de Requisición de Materiales, y en el 5% de las órdenes de compra, la Superintendencia obligó los fondos 52 días después de recibir los servicios.
Estas situaciones, contrarias al Reglamento de Compras de 2014, pueden afectar la transparencia en los procesos ya que no promueven la competencia abierta y justa entre proveedores, según el texto.
Además, en el 45% de las órdenes de compra, se prepararon los formularios de Informe de Recibo e Inspección hasta 63 días después de la fecha de facturación, y en el 5% se recibieron bienes distintos a los solicitados.
Los auditores detectaron también que el 10% de las facturas presentadas por dos proveedores no incluyeron la certificación requerida por el Código de Ética de los Contratistas.
Estas deficiencias propiciaron que la Superintendencia no llevara a cabo un control adecuado de las compras. De este modo, la Superintendencia tampoco contaba con las certificaciones que garantizan que ninguno de sus empleados tiene interés alguno en las ganancias producto de la compra.
La auditoría de tres hallazgos señala que la Superintendencia no puede ejercer un control adecuado de los bienes adquiridos para otras entidades de la Asamblea Legislativa, ya que las Normas sobre el Presupuesto y el Reglamento de Propiedad carecen de disposiciones al respecto.
El informe indica asimismo que 10 empleados ejercían funciones conflictivas de receptores en el módulo de Compras y Requisiciones con el acceso a los documentos del proceso de compras. Este hecho, contrario al Reglamento de Administración y Uso de los Sistemas, propicia que se cometan errores o irregularidades.
El presupuesto de la Superintendencia fue de 167,8 millones de dólares del 2017 al 2024. Se habían realizado desembolsos por $147.7 millones al 30 de junio de 2024.
La auditoría le recomienda a los presidentes del Senado y de la Cámara de Representantes que tomen las medidas necesarias para asegurarse que el superintendente del Capitolio cumpla con las recomendaciones de este informe y que las situaciones mencionadas no se repitan.