La influenza aviar es una enfermedad viral que afecta principalmente a las aves, pero puede transmitirse a humanos y otros mamíferos bajo ciertas condiciones
San Juan, Puerto Rico – El primer caso de gripe aviar en Puerto Rico fue confirmado en días recientes en el municipio de Culebra, específicamente en gallinas. Ante esta situación y la propagación del virus en los Estados Unidos, el Departamento de Agricultura y el Departamento de Salud han activado protocolos estrictos para controlar y prevenir su avance en la Isla.
La gripe aviar, conocida científicamente como influenza aviar, es una enfermedad viral que afecta principalmente a las aves, pero puede transmitirse a humanos y otros mamíferos bajo ciertas condiciones. Aunque en Puerto Rico no se han registrado casos en humanos hasta la fecha, los expertos advierten sobre la importancia de mantenerse alerta debido a la naturaleza compleja y potencialmente grave del virus.
Riesgos y transmisión
En los Estados Unidos, el virus ha sido detectado recientemente en aves silvestres, gallinas, vacas y gatos. La principal vía de transmisión a los humanos es el contacto directo o indirecto con animales infectados o superficies contaminadas, como gallineros. Según el Centro de Control de Enfermedades (CDC), actividades como desplumar aves infectadas, manipular sus cadáveres o preparar aves de corral para el consumo incrementan el riesgo de contagio. Entre los síntomas en humanos destacan fiebre, problemas respiratorios y conjuntivitis.
El Colegio de Médicos Veterinarios de Puerto Rico (CMVPR) emitió una serie de medidas preventivas para reducir el riesgo de transmisión.
Evitar el contacto con aves muertas o enfermas, especialmente aves silvestres, y reportar cualquier avistamiento al USDA-APHIS-VS o al Departamento de Agricultura de Puerto Rico.
Practicar buena higiene, lavarse las manos después de estar cerca de aves y desinfectar zapatos y ropa al salir de un gallinero.
No tocar superficies que puedan estar contaminadas con saliva, mucosa o heces de aves.
Desinfectarse los zapatos y cambiarse de ropa al salir de un gallinero y antes de entrar en el siguiente.
Aunque el riesgo de transmisión del virus a través de alimentos mal cocidos es bajo, el CMVPR recomienda seguir prácticas de seguridad alimentaria, como separar alimentos crudos de los cocidos, cocinar completamente el pollo y los huevos, y asegurarse de que los ingredientes sean de calidad y de proveedores confiables.
Para más información y reportes, el público puede comunicarse con el Colegio de Médicos Veterinarios al 787-520-0237 o visitar sus redes sociales en Facebook e Instagram.