San Juan (26 de mayo de 2021) EFE – El representante popular Héctor Ferrer Santiago anunció este miércoles que la Cámara baja aprobó su Proyecto 338, que propone la creación de una comisión para aumentar el salario mínimo a $8.25 la hora.
En un comunicado de prensa, Ferrer Santiago indicó que su propuesta se da debido a que la clase trabajadora en Puerto Rico vive una situación económica difícil, que se agravó aún más con la pandemia.
Por ello, más de 300,000 personas que ocupan un puesto de trabajo sujeto al salario mínimo federal, que es de $7.25 la hora, equivalente a un salario anual de $15,080 dólares.
«Es momento de hacerle justicia salarial a estos trabajadores», precisó Ferrer Santiago, quien añadió que debe realizarse mediante un análisis serio que redunde en un balance y beneficios para todos los sectores involucrados.
La medida legislativa establece que la mencionada comisión tendrá el propósito de definir una metodología para realizar un aumento al salario mínimo en Puerto Rico y estaría integrada por los secretarios del Departamento del Trabajo y Recursos Humanos, los líderes legislativos, entre otros titulares de agencias.
La comisión contará además con un miembro de la Coalición del Sector Privado, un catedrático en Economía, otro de Estadísticas y otro de Derecho Laboral, un representante de los intereses de los trabajadores, un representante del sector sindical u obrero de Puerto Rico, un representante del sector comercial-patronal proveniente de alguna pequeña o mediana empresa puertorriqueña y un representante del sector cooperativista puertorriqueño.
La comisión deberá entregar dos informes durante el período de seis meses, de los cuales uno debe ser un informe parcial y el subsiguiente un informe final.
Como parte de estos informes, se analizará cómo el aumento al salario mínimo propuesto por la Comisión, si alguno, afecta las cualificaciones de los participantes que reciben ayudas federales económicas de alimentos, vivienda, entre otras.
Así también se analizará el costo de vida para los pensionados, retirados, desempleados y cualquier otra persona que por una razón u otra no forman parte de la fuerza laboral, el impacto y consecuencias, si algunas, a los pequeños y medianos comercios y el efecto directo o indirecto a la economía puertorriqueña.
«Contrario a lo que indican otras fuentes, otorgar un aumento en el salario mínimo tendría un efecto positivo en el desarrollo económico de Puerto Rico», afirmó Ferrer Santiago.
«El estudio que lleve a cabo la comisión propuesta deberá dar énfasis a la importancia de alcanzar este aumento para mejorar la desigualdad económica existente», enfatizó.