En 2020, la diabetes fue la tercera causa de muerte en la isla, con sobre 3,000 decesos adjudicados a la condición
Por Ivelisse Rivera Quiñones
San Juan, Puerto Rico – En los últimos años, la prevalencia de la diabetes en Puerto Rico ha mostrado un aumento alarmante. Aunque los datos del Estudio de Enfermedades Crónicas del Departamento de Salud de Puerto Rico 2018-2020, colocaron la prevalencia de esta enfermedad en la población adulta fluctuando entre un 13.1% y un 15.5%, los números del Behavioral Risk Factor Surveillance System (BRFSS), colocan la prevalencia actual en un 20%.
A juicio del Dr. José García Mateo, endocrinólogo y especialista en diabetes y presidente de la Sociedad Puertorriqueña de Endocrinología y Diabetología (SPED), la situación en Puerto Rico podría ser aún más grave de lo que indican las estadísticas oficiales.
“Ha aumentado. Ahora mismo la prevalencia está en un 20%. Es un número bien elevado y se dice que está bajo estimado. Esas estadísticas muchas veces se hacen en el área metropolitana. Así que si se toma en cuenta el centro de la isla y otras áreas, probablemente el número es mayor. También hay personas que no tienen el diagnóstico”, destacó el doctor García Mateo, presidente de SPED.
Estos números superan por mucho la tasa de prevalencia en Estados Unidos, que fue de un 10.8% entre 2018 y 2020.
El doctor explicó que los hábitos alimenticios de los puertorriqueños, así como el aumento en el trabajo sedentario y los determinantes sociales como bajo nivel económico y poca o ninguna escolaridad, son factores clave para el aumento alarmante de casos en la isla. Situación que podría derivar en una crisis de salud pública.
Según el estudio del Departamento de Salud, para el año 2020 los grupos de mayor prevalencia en Puerto Rico fueron: mujeres (16.3%), personas de 65 años o más (38.0%), personas con un ingreso anual menor de $15,000 (19.6%), personas con un nivel de cuarto año o menos (21.3%)
“El sistema de salud en Puerto Rico es muy bueno, pero los determinantes sociales de salud influyen mucho y eso obviamente ha traído un aumento en la prevalencia”, dijo el doctor, mientras enfatizaba la importancia de la educación para prevenir la condición y en el caso de ya padecerla, poder evitar complicaciones.
“Hacer evaluaciones de cernimiento e identificar factores de riesgo como obesidad, hipertensión… es clave. Tanto para que el paciente que está a riesgo no desarrolle la condición, como aquel que ya la tiene, no desarrolle complicaciones asociadas. O si ya tiene las complicaciones que no progresen”, enfatizó el especialista en endocrinología, al tiempo que recordaba que un cambio en hábitos alimenticios, así como incluir actividad física en la rutina, puede prevenir la condición.
En el caso de los pacientes que ya tienen la condición, el doctor García Mateo subrayó que su tratamiento debe ser de dos vías.
“La vía para controlar el azúcar y, a su vez, la vía para controlar complicaciones. Tienes que controlar el azúcar y usar herramientas que tengan beneficios en las complicaciones para evitarlas o tratarlas de manera correcta”, esto se logra según el doctor, teniendo un tratamiento multidisciplinario y con la comunicación entre los especialistas que tratan al paciente.
En 2020, la diabetes fue la tercera causa de muerte en Puerto Rico, con 3,197 defunciones, solo superada por enfermedades del corazón y tumores malignos. En comparación, a nivel mundial, en 2019 la diabetes fue la novena causa de muerte, con aproximadamente 1.5 millones de muertes atribuidas directamente a la enfermedad.
Aunque la prevalencia es alarmante y el panorama luce sombrío, el Dr. García Mateo se mostró optimista, debido a los avances en el tratamiento y manejo de la diabetes. En Puerto Rico, los pacientes tienen acceso a tecnologías como sensores de glucosa y sistemas de infusión continua de insulina, que han revolucionado la forma de manejar la enfermedad.
“La prevalencia ha aumentado, pero la buena noticia es que hay más herramientas para tratar la condición”, comentó.
Sin embargo, el acceso a estos tratamientos sigue siendo limitado para muchos debido a las barreras económicas.
“Todavía hay una resistencia económica, tanto del paciente porque no puede costear el tratamiento, como a veces del plan médico que hay que convencerlo para que apruebe la terapia. Estas condiciones crónicas es mucho más costoefectivo tratar mejor la condición y la complicación. Si lo tratas bien, vas a tener un paciente que todavía trabaja, que no gasta tanto al sistema de salud porque si lo tratas bien desde el principio no llega al hospital. Es tratar a ese paciente con las guías terapéuticas que tenemos hoy por hoy”, añadió el galeno.
El Día Nacional de la Diabetes, que se conmemora hoy, 14 de noviembre, es una oportunidad para sensibilizar a la población sobre la importancia de la prevención y el manejo adecuado de la diabetes.
Como parte de las actividades de la fecha, la Sociedad Puertorriqueña de Endocrinología y Diabetología recibirá una proclama en La Fortaleza.
García Mateo, además, exhortó a la comunidad a vestirse de azul para visibilizar la enfermedad y la importancia de la concienciación sobre esta.
La educación continua, el diagnóstico temprano y el acceso a tratamiento son clave para reducir el impacto de esta enfermedad crónica en Puerto Rico.