San Salvador (EFE) – El presidente salvadoreño, Nayib Bukele, aseguró que puede arreglar la grave crisis de violencia que sufre Haití si cuenta con el visto bueno de las autoridades locales y de la ONU, e insistió en que es posible «aniquilar» a las bandas haitianas, una victoria que ya consiguió en El Salvador.
«Podemos arreglarlo. Pero necesitaremos una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, el consentimiento del país anfitrión y que estén cubiertos todos los gastos de la misión», publicó Bukele en inglés en su cuenta de X, cerca de la medianoche del sábado, en reacción al mensaje de un usuario.
Hora más tarde, el mandatario salvadoreño, conocido por su «guerra contra las pandillas» con la que logró que su país pasase de ser uno de los más peligrosos del mundo al más seguro de América Latina, según sus palabras, volvió a la misma red social para profundizar en la problemática de Haití.
Bukele reaccionó a un vídeo en el que supuestamente se veía al miembro de una banda en Haití comiendo restos humanos, en imágenes sin datar y que podrían tener varios meses, mientras se muestra de manera explícita cómo retira de una hoguera callejera la pierna chamuscada de una víctima y le arranca trozos de carne.
«Vimos imágenes similares en El Salvador hace unos años. Pandillas bañándose con los cráneos de sus víctimas», explicó Bukele.
Ante esa situación, añadió, «todos los ‘expertos’ dijeron que no podían ser derrotadas (las pandillas), porque eran una ‘parte intrínseca'» de la sociedad salvadoreña.
«Se equivocaron. Las aniquilamos. Lo mismo debe hacerse en Haití», sentenció el mandatario salvadoreño.
Propuestas de El Salvador sobre Haití
Esta no es la primera propuesta de El Salvador sobre Haití. En enero de 2023, el país centroamericano ya se había comprometido a abrir una oficina de cooperación en la nación isleña para «reducir los altos índices de criminalidad», según informó entonces la Vicepresidencia.
Meses después, en marzo, el vicepresidente, Félix Ulloa, afirmó en la XXVIII Cumbre Iberoamericana que su país estaba listo para enviar una misión de asistencia a Haití tras un intercambio de notas entre Bukele y el primer ministro haitiano, Ariel Henry.
«Es hora de pasar a la acción, ha habido muchos discursos, muchos acuerdos, muchas resoluciones sobre el caso haitiano, pero hay que ir sobre el terreno y El Salvador está listo para enviar una misión inmediatamente se terminen los acuerdos diplomáticos», agregó el vicemandatario salvadoreño.
Bukele y sus funcionarios afirman que El Salvador se ha convertido en el país más seguro del Hemisferio Occidental gracias a la implementación de un régimen de excepción enfocado en la «guerra contra las pandillas», que suspende derechos constitucionales y ha dejado más de 78.100 detenciones.
La política de seguridad de detenciones masivas ha sido criticada por organismos locales e internacionales de derechos humanos, que han recibido denuncias de atropellos, entre detenciones arbitrarias, tortura y muertes en prisiones sin esclarecer.
La violencia en Puerto Príncipe ha aumentado significativamente desde que el 28 de febrero se conociera que Henry se había comprometido a celebrar elecciones en Haití antes de finales de agosto de 2025, una fecha muy lejana si se tiene en cuenta que el primer ministro debió concluir su mandato el pasado 7 de febrero, según un acuerdo de 2022.