Ginebra (EFE) – La situación en el Hospital Naser de Jan Yunis, el principal que seguía atendiendo pacientes en Gaza hasta que días de asedio y combates pusieran fin a su funcionamiento, es «indescriptible», afirmó hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS), que continúa la evacuación de internos.
El 18 y 19 de febrero la OMS participó en la evacuación de 32 pacientes, incluidos dos niños, a otras instituciones sanitarias en Jan Yunis, Rafah y la zona central de la franja, indicó en rueda de prensa el portavoz de la agencia sanitaria de la ONU Tarik Jasarevic.
«Alrededor de 130 pacientes y al menos 15 doctores y enfermeras continúan dentro del hospital», destacó la fuente oficial, subrayando que el centro no tiene electricidad ni agua corriente, mientras que la concentración de basuras y desechos en la instalación puede convertirse en foco de infecciones.
«Tememos por la seguridad y el bienestar de los pacientes y trabajadores sanitarios que siguen en el hospital, y advertimos que una nueva perturbación al cuidado de enfermos y heridos puede resultar en más muertes», indicó Jasarevic.
Durante los más de cuatro meses de conflicto, los hospitales de Gaza se han convertido a menudo en escenario principal de combates y objetivo de ataques, y muchos de ellos, especialmente en el norte de la franja, han tenido que detener sus operaciones por la destrucción de las instalaciones o la falta de combustible y suministros.
«El desmantelamiento y degradación del Complejo Médico Naser es un duro golpe para el sistema sanitario de Gaza, en un momento en el que las instalaciones sanitarias del sur de la franja operan ya muy por encima de su capacidad máxima y apenas pueden recibir más pacientes», aseguró la OMS.
Las evacuaciones de hospitales se ven dificultadas por el retraso de las autoridades israelíes a la hora de dar acceso a actores humanitarios a las instalaciones, y por el mal estado de las carreteras, indicó la agencia de la ONU.