Sídney, Australia (EFE) – La diócesis católica de Christchurch en Nueva Zelanda ha expulsado a la congregación ultraconservadora de Los Hijos del Santísimo Redentor por supuestamente practicar exorcismos violentos y no autorizados, además de cometer abusos psicológicos y espirituales contra sus miembros, incluidos menores.
En una carta firmada el 14 de julio y hecha pública hoy, el obispo de Christchurch, Michael Gielen, desautoriza a los sacerdotes de esta congregación a «ejercer el sagrado ministerio» y les ordena «abandonar la diócesis», tras las recomendaciones enviadas por el Vaticano.
«Ha sido un tiempo difícil para mucha gente y les pido que recen por los implicados», dijo Gielen en la misiva publicada en la página web del obispado y en la que precisa que la decisión fue tomada por el bien de la Iglesia y de la diócesis.
La decisión fue adoptada después de que, tras varias denuncias, el Vaticano encargara el pasado noviembre al obispo australiano Robert McGuckin que viajara a Nueva Zelanda e iniciara una investigación.
En la misiva, el obispo Gielen explica que había tomado la decisión de expulsar a este grupo, también conocida como los Redentoristas Transalpinos, teniendo en cuenta las recomendaciones hechas por el Vaticano tras su investigación.
Las denuncias, que comenzaron en 2021, se pusieron en marcha por parte de la Red de Supervivientes de Abusados por Sacerdotes (SNAP, siglas en inglés), que asegura que durante los exorcismos llevados a cabo por la congregación se le decía a los niños que estaban poseídos por Satanás.
La presión contra la congregación se intensificó el año pasado con la emisión de programa de la cadena de televisión neozelandesa TV3.
En ese programa, Greg Price, un exmiembro de esta orden, contaba que una de las prácticas durante los exorcismos era «atar a la persona por el cuello al respaldo de una silla» y, mientras, ejercer sobre ella otros tipos de violencia.
Una joven víctima dijo, también a la cadena TV3, que les hicieron creer que «autolesionarse bajo la apariencia de penitencia física complacía a Dios», así que comenzó a realizarse cortes cuando rezaba.
Otro de los antiguos miembros de la congregación y víctima de abusos relató este martes al diario New Zealand Herald que le forzaron a lamer el suelo dibujando la forma de una cruz como penitencia o a tenderse sobre el suelo mientras otros caminaban sobre él.
El director de la filial neozelandesa de SNAP, Christopher Longhurst, calificó este martes en declaraciones al canal público Radio New Zealand como «inadecuada» la respuesta del obispo de Christchurch porque considera que los sacerdotes de esta congregación pueden continuar con sus prácticas bajo otras diócesis.
Los Hijos del Santísimo Redentor cuentan con congregaciones en todos los continentes y entró en la diócesis de Christchurch en 2009. Actualmente están liderados por los padres Michael y Anthony Mary.
Según datos de la Iglesia católica citados por la publicación Catholic News en junio de 2023, en los cinco años previos se autorizaron 12 exorcismos en Nueva Zelanda, aunque no todos ellos fueron llevados a cabo.