Un conductor embiste a una multitud en pleno Barrio Francés durante las celebraciones de Año Nuevo
Nueva Orleans vivió un inicio trágico del 2025 tras un ataque deliberado que dejó 10 muertos y 30 heridos en el corazón del Barrio Francés. En las primeras horas del Año Nuevo, un hombre al volante de una camioneta blanca embistió a una multitud en la intersección de Canal y Bourbon Streets, un lugar icónico conocido por su vibrante vida nocturna.
El ataque ocurrió alrededor de las 3:15 AM, según la agencia local de emergencias NOLA Ready. El conductor atravesó las barricadas de seguridad a gran velocidad, arrollando a decenas de personas que celebraban el Año Nuevo.
Además, el atacante disparó contra agentes de policía, hiriendo a dos, quienes se encuentran en estado estable. La policía respondió rápidamente, abatiendo al sospechoso cuando este salió del vehículo armado con un rifle de asalto.
La superintendente de policía de Nueva Orleans, Anne Kirkpatrick, confirmó que el ataque fue premeditado. «Esto no fue un accidente ni el resultado de un estado de ebriedad. Fue un acto deliberado para causar daño», señaló en conferencia de prensa.
El sospechoso y la investigación
El sospechoso, cuya identidad aún no ha sido revelada, fue declarado muerto en la escena. Autoridades locales y el FBI están registrando el vehículo y analizando evidencia para determinar el motivo del ataque. También se investiga un presunto artefacto explosivo improvisado encontrado en el lugar, lo que ha incrementado las preocupaciones de las autoridades sobre la naturaleza del incidente.
Miles de personas se encontraban en el área disfrutando de un concierto al aire libre y de los eventos organizados para la cuenta regresiva de Año Nuevo. La celebración se transformó en pánico cuando el vehículo embistió a la multitud.
Testigos relataron escenas de caos, con gritos y carreras mientras buscaban refugio en bares y restaurantes cercanos. La policía ha acordonado la zona y ha pedido a los visitantes evitar el área, que ahora es una escena del crimen.
Impacto en la comunidad
La mayoría de los heridos son residentes locales, según las autoridades. Todos los afectados han sido trasladados a hospitales cercanos, donde los equipos médicos trabajan arduamente para atenderlos.
La alcaldesa de Nueva Orleans, LaToya Cantrell, condenó el ataque, calificándolo como un «acto terrorista», aunque el FBI aún no ha determinado oficialmente su clasificación. «Este es un recordatorio devastador de las amenazas que enfrentamos en eventos multitudinarios», declaró.
El gobernador de Luisiana, Jeff Landry, expresó su solidaridad con las víctimas y elogió el trabajo de los primeros en responder. «Este acto atroz ha sacudido a nuestra comunidad, pero también ha mostrado la valentía de quienes protegen nuestra seguridad», afirmó.
La Casa Blanca ha sido informada del incidente, subrayando la gravedad del ataque a nivel nacional. Las autoridades han reforzado la seguridad en la ciudad, particularmente con la llegada de turistas para el Sugar Bowl, uno de los eventos deportivos más importantes del año.
Nueva Orleans en duelo
Mientras la ciudad procesa esta tragedia, se están organizando vigilias y memoriales para honrar a las víctimas y ofrecer apoyo a sus familias. Este atentado, calificado como «otro episodio de violencia masiva», subraya los riesgos inherentes a grandes concentraciones públicas.