Colombo, 3 de abril de 2022 (EFE) – Los 26 ministros del gobierno de Sri Lanka dimitieron en masa este domingo en plena escalada de tensión por la oleada de protestas derivada de la grave crisis económica que atraviesa la nación isleña pese al toque de queda.
«Todos los ministros del gabinete firmaron una carta de renuncia colectiva y se la presentaron al primer ministro para permitir que tanto el presidente como el primer ministro decidan sobre la causa futura», dijo a Efe el portavoz el Gabinete del Gobierno, Keheliya Rambukwella.
Los ministros presentaron una carta de dimisión conjunta, tras mantener una reunión sobre su futuro en el gabinete, que debe ser aceptada por el presidente del país, Gotabaya Rajapaksa, por lo que, de momento, se desconoce si su renuncia se hará efectiva de forma inmediata.
Si son aceptadas, se espera que el presidente invite «a la oposición el lunes para ofrecer ciertas carteras de gabinete», y comience con los nombramientos clave, subrayó Rambukwella.
La renuncia sin precedentes de todos los ministros de Sri Lanka se produce como consecuencia de la oleada de protestas por la peor crisis económica que atraviesa la nación desde la independencia del imperio británico en 1948.
La escasez de productos esenciales, los cortes de energía prolongados y la depreciación de más del 60% de la rupia esrilanquesas en solo tres semanas aumentaron las tensiones.
Con el objetivo de evitar que las manifestaciones se tornasen violentas, las autoridades impusieron desde el viernes por la tarde un toque de queda que tiene previsto concluir a primera hora de este lunes.
Sin embargo, el país vivió hoy una jornada de intensas protestas, después de que varios grupos de personas salieran a las calles para exigir la dimisión del presidente de Sri Lanka y del primer ministro, su hermano Mahinda Rajapaksa, los únicos que mantienen su cargo.
Previo al toque de queda, el gobierno decretó el estado de emergencia la noche del viernes, tras los disturbios ocurridos el pasado jueves por la noche, cuando decenas de personas intentaron entrar en una residencia oficial del presidente esrilanqués en medio de una manifestación silenciosa.
Estas protestas tuvieron su raíz el mismo día que aumentó la duración de los cortes de energía a 13 horas, la mayor subida en la historia de la nación, tras no poder hacer frente al pago de un cargamento que iba a entrar al país.
Sri Lanka atraviesa una de las peores crisis económicas de su historia derivada de la merma de sus reservas internacionales y un gran endeudamiento.
Sin divisas suficientes para adquirir alimentos, combustible y necesidades básicas, el país entró hace meses en una espiral inflacionaria y de escasez.
En medio de este panorama, la vecina India aprobó recientemente una línea de crédito de mil millones de dólares como parte de su asistencia financiera para enfrentar la crisis y además extendió una línea de crédito para combustible y derivados del petróleo.
El país insular registró un crecimiento negativo del PIB del 3,6 % en 2020 debido a la falta de turistas y las restricciones por la pandemia, según el FMI, que apuntó a que se prevé que la deuda pública haya aumentado hasta el 119 % del PIB en 2021 frente al 94 % en 2019.