Washington (EFE) – El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, condenó la violencia política y acusó al expresidente Donald Trump de poner en riesgo la democracia en el país, a menos de una semana de las elecciones de término medio.
«No hay lugar para la intimidación a los votantes o la violencia política en EE.UU., sea esta dirigida a demócratas o republicanos», dijo el mandatario este miércoles en un discurso en Washington.
Biden condenó una vez más el ataque al esposo de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y señaló que el perpetrador estuvo influenciado por la idea de un falso fraude electoral, promovida por el expresidente Donald Trump.
«La democracia estadounidense está bajo ataque porque el expresidente de EE.UU. se rehúsa a aceptar los resultados de las elecciones de 2020», sentenció el mandatario en su intervención en el Columbus Club, cerca del Capitolio.
Parte de los candidatos republicanos a las legislativas, que se celebran este 8 de noviembre, apoyan la idea de que las pasadas presidenciales fueron fraudulentas, al mismo tiempo que han sugerido que podrían no reconocer los resultados de los próximos comicios.
El mandatario aseguró que el hecho de que haya personas que cuestionen la legitimidad de las elecciones en las boletas electorales abre un «camino al caos» en el país “sin precedentes”.
«Mientras estoy hoy aquí, hay candidatos a todos los niveles de gobierno (…) que no se comprometen a aceptar los resultados de las elecciones en las que están participando», señaló Biden y pidió a los estadounidenses acudir a las urnas para defender la democracia.
Más de 300 candidatos que aspiran a distintos puestos en el gobierno a nivel federal y estatal en las próximas elecciones han hecho eco de la teoría de un falso fraude electoral en las comicios de 2020, según un estudio del centro Brookings.
Por su parte, un 39% de los votantes republicanos opinan que, si su candidato pierde en las próximas elecciones, será debido a un fraude electoral, según una encuesta de Ipsos y el portal Axios publicada a principios de mes.
Paul Pelosi, el esposo de Nancy Pelosi, sufrió un ataque el pasado viernes mientras se encontraba en el domicilio de la familia en San Francisco. El agresor irrumpió en la vivienda al grito de «¿Dónde está Nancy?» y tenía la intención de romperle las rodillas a la líder demócrata, según las autoridades.