Moscú (EFE) – Los aliados del fallecido líder opositor ruso, Alexéi Navalni, acusaron hoy directamente al presidente, Vladímir Putin, de ordenar su asesinato en prisión, sospechas a las que contribuyó la negativa a entregar el cadáver a la familia.
«Hace tres años y medio Putin intentó asesinar a Alexéi. Ayer lo mató», aseguró Kira Yarmysh, portavoz del opositor, en un vídeo colgado en YouTube.
La jornada de duelo estuvo marcada en este país por la detención de cientos de personas que rindieron tributo a Navalni en los monumentos a las víctimas de las represiones políticas soviéticas, una demostración de que el Kremlin no quiere que la muerte del opositor se convierta en motivo de protestas antibubernamentales.
Certificado de defunción
«Los familiares y el abogado de Navalni recibieron la confirmación oficial sobre la muerte de Alexéi», añadió Yarmysh, en alusión a la madre de Navalni, Liudmila Naválnaya, que voló desde Moscú al distrito autónomo Yamalo-Nénets, en el círculo polar ártico.
Su madre llegó este sábado a la prisión ártica «Lobo Polar» de la localidad de Jarp, donde ya se había reunido con su hijo el pasado 12 de febrero y lo había encontrado de buen ánimo.
Yarmysh precisó que el opositor falleció a las 14.17 hora local (09.17 GMT) del viernes, dos horas antes de que los servicios penitenciarios lo anunciaran públicamente.
El Comité de Instrucción de Rusia informó en Salejard, capital regional, de que «la causa de la muerte de Alexéi no ha sido establecida» tras un segundo análisis histológico cuyos resultados se conocerán la próxima semana.
«Cuando el abogado y la madre de Alexéi llegaron esta mañana a la prisión, les dijeron que el motivo de la muerte de Navalni fue el síndrome de muerte súbita», dijo Iván Zhdánov, abogado y mano derecha del fenecido político.
Denunció contradicciones entre las versiones de la prisión y del CIR, en lo que coinciden organizaciones de derechos humanos como Gulagu.net, y añadió que las noticias de la prensa oficial sobre que el opositor sufrió una «trombosis» se demostró que eran falsas.
La familia exige el cadáver
«Los funcionarios de prisiones informaron de que el cuerpo de Navalni se encuentra en Salejard. Se lo llevaron los investigadores del Comité de Instrucción. Ahora están realizando ‘exámenes'», dijo irónicamente.
Los aliados de Navalni denuncian que la morgue de Salejard estaba cerrada y que nadie sabía dónde está el cuerpo del opositor.
«Exigimos que el cuerpo de Alexéi Navalni sea entregado inmediatamente a su familia», señaló Yarmysh.
Según el equipo de Navalni, el CIR, organismo que depende directamente de la Presidencia rusa, aseguró que «mientras la investigación no concluya, no entregarán el cuerpo de Alexéi a los familiares».
«Es evidente que los asesinos quieren borrar las huellas, ya que no entregan el cuerpo de Alexéi y se lo esconden incluso a su madre», añadió.
El periódico ‘Nóvaya Gazeta’ lanzó una petición para que las autoridades entreguen el cadáver a la familia que ya ha sido firmada por más de 12.000 personas.
Los rusos rinden memoria a Navalni
Mientras, miles de simpatizantes de la oposición al Kremlin depositaron ramos de flores y velas durante todo el día en diferentes ciudades de Rusia en memoria del opositor.
Algunos incluso salieron a la calle y organizaron piquetes individuales con lemas como «Putin, asesino», actos pacíficos que se toparon con una dura respuesta de la policía antidisturbios.
Según OVD-Info, organización que vela por los derechos de los opositores detenidos, al menos 273 personas han sido detenidas desde el viernes en más de una treintena de ciudades.
Más de la mitad de las detenciones fueron practicadas el sábado, medio centenar de ellas en Moscú, especialmente en el Muro del Dolor, monumento dedicado a los represaliados.
Las fuerzas del orden y agentes de paisano intentan desde el viernes retirar todos los memoriales improvisados creados por los partidarios de la oposición y borrar todas las pintadas con el nombre de Navalni.
Así ocurrió, según los canales de Telegram locales, frente al Kremlin en el puente donde fue asesinado en 2015 el también dirigente opositor, Boris Nemtsov.
De icono a mártir
Mandatarios como el expresidente estadounidense Barack Obama o el magnate y opositor Mijaíl Jodorkovski coincidieron al condenar al Kremlin, pero también a la hora de proclamar que Navalni «es un ejemplo de coraje que nunca morirá».
«Esto no es una muerte, sino un asesinato», denunció OVD-Info, que acusó al Estado ruso de cometer «un atentado contra la esperanza».
El diario digital Meduza, con sede en Letonia, publicó un epitafio que terminaba así: «La lucha entre el bien y la indiferencia aún no ha terminado».
“Lo mataron. Le tienen miedo hasta después de muerto (…) Donde está Putin, hay guerra, odio y sangre”, denunció una anciana que sobrevivió al Bloqueo de Leningrado (1941-44) en un vídeo que se ha convertido en viral.