San Juan, 30 de junio (EFE) – Con el debut del enebeísta José Alvarado la selección adulta de Puerto Rico, compuesta de jugadores jóvenes y veteranos, se cantó lista para sus próximos dos partidos de la tercera ventana clasificatoria al Mundial 2023.
Alvarado, base de los New Orleans Pelicans (NBA), se estrenará con la escuadra puertorriqueña mañana, viernes ante Estados Unidos y luego el próximo 4 de julio frente a México en enfrentamientos a celebrarse en el coliseo Roberto Clemente de San Juan.
«Es grandioso y un honor representar a Puerto Rico. Estoy muy emocionado de estar aquí, y sentirme querido y respaldado por tantos jugadores jóvenes como yo», resaltó Alvarado en rueda de prensa donde se presentó al resto de la escuadra.
Además de Alvarado, Phillip Wheeler hará su debut con la selección puertorriqueña, cuyo director técnico es Nelson Colón, quien entró al máximo puesto tras la salida de Eddie Casiano.
Wheeler es uno de los candidatos más fuertes para ganar el premio Jugador Más Valioso del Baloncesto Superior Nacional (BSN) esta temporada con los Piratas de Quebradillas.
El resto de la selección de Puerto Rico la completan el capitán y armador principal, Gary Browne, Jezreel De Jesús, Ysmael Romero, Timajh Parker-Rivera, George Conditt, Justin Reyes, Javier Mojica, Gian Clavell, Chris Ortiz y Jordan Murphy.
Colón, por su parte, dijo que los dos partidos de los próximos días son «sumamente importante para nosotros», pues sus resultados dependerán del puesto en que terminen en su Grupo D para entones enfrentarse en la próxima ronda ante los primeros tres que terminen del Grupo C.
Actualmente, en el Grupo D Puerto Rico ocupa el tercer puesto, detrás de Estados Unidos y México.
«Sabemos lo que significan estos dos juegos. Estamos jugando nuestro papel para la segunda ronda. Necesitamos ganar los dos partidos», aseguró.
A su vez, reconoció que la plantilla de Estados Unidos «varía de ventana en ventana», aunque aseguró que «es un equipo sólido, que ha subido y bajado de la NBA a la G League», en referencia a la liga de desarrollo de la NBA.
Asimismo, aseguró que el juego de México «es uno vital para nosotros, el más importante de los dos», pero afirmó que debe tomar «un juego a la vez».
«Tenemos que dar el máximo ante Estados Unidos, ganarlo y tener dos días para prepararnos para México, que será un juego fuerte, físico y que viene con un mejor grupo del que jugó la ventana pasada», dijo Colón.
No obstante, aseguró que en esta ocasión el resultado será diferente, pues sus jugadores competirán ante su gente y posiblemente frente a casa llena en el coliseo capitalino, considerado «La catedral del baloncesto» local.
«Esto es un equipo joven. Algunos de ellos pueden jugar distintas posiciones, por lo que tenemos que prepararnos, pues de esa manera nos da un empuje en el sentido de que Alvarado puede jugar en la posición dos y Gary en la uno», explicó.
Para la preparación de esta selección, el federativo puertorriqueño contrató los servicios del exarmador estadounidense Mike Bibby por recomendación del ahora gerente de la selección local y también exbase Carlos Arroyo.
«Ya con José tuvimos unas conversaciones y dice que quiere seguir mejorando y quiere seguir jugando aquí. Es un jugador de futuro para el beneficio de todos nosotros», aseguró Colón.
Sobre Alvarado, sostuvo que está al tanto del compromiso de los jugadores, la historia del baloncesto de Puerto Rico y que será la primera vez que utilizará el uniforme en representación de su familia y cultura.
«Está bien receptivo en lo que es explicarle la diferencia del baloncesto de la NBA con el de FIBA. Tuve que explicarle que va a tomar tiempo, enseñarle a que no se frustre y acostumbrarse a la pelota FIBA, que el espacio de juego es más pequeño y acostumbrarse al pito de los árbitros», explicó.