«Me equivoqué cuando hice lo que hice, ¿de acuerdo? No puedo recuperarlo. Sin embargo, desearía que el béisbol me diera la oportunidad. He sido castigado con bastante severidad»
Redacción Deportes (EFE) – Pete Rose, líder de hits en siete temporadas de las Grandes Ligas (1965, 1968, 1970, 1972, 1973, 1976 y 1981), falleció este lunes a los 83 años por causas no reveladas, informó los Rojos de Cincinnati, la organización en la que jugó 19 de sus 24 años de carrera.
Ni el veto de la MLB a Rose por su relación con apuestas mientras fue dirigente empañó la leyenda del hombre que lideró cuatro veces la clasificación de anotadas en la Liga Nacional (1968, y del 1974 al 76) y conquistó tres títulos de bateo (1968, 1969 y 1973).
«Los Rojos están desconsolados al enterarse del fallecimiento de la leyenda del béisbol Pete Rose», publicó el equipo en X.
Ryan Fiterman, representante de Rose, dijo a TMZ Sports, que la familia ha solicitado respeto a la privacidad para lidiar con la muerte del exbateador nacido el 14 de abril de 1941 en Western Hills, Cincinnati.
Durante su carrera, el exjugador de Rojos, Filis de Filadelfia y Expos de Montreal elevó el listón en número de hits (4.256), turnos al bate (14.053), apariciones en el plato (15.890) y juegos (3.562).
Con promedio al bate de .303, sumado a sus 746 dobles, 135 triples y 160 jonrones, Rose también registró 2.165 carreras anotadas y 1.314 remolcadas.
Conquistó el premio Novato del Año en su debut en 1963 y ganó el premio al Jugador Más Valioso en la campaña de 1973.
En lunar en su carrera se registró en 1989 por el veto que hasta el día de su muerte le impidió ser seleccionado al Salón de la Fama de las Grandes Ligas, debido a su relación con las apuestas.
Aunque en un principio Rose negó haber apostado, la MLB presentó pruebas que sustentaron su acusación.
Rose, caracterizado por sus polémicas declaraciones, se refirió con cruda ironía al reciente escándalo de apuestas protagonizado por el intérprete del japonés Shohei Ohtani, que tomó más de $16 millones del astro para gastarlo en juegos.
«Me hubiera gustado tener un intérprete. Estaría libre de problemas», declaró.
«Me equivoqué cuando hice lo que hice, ¿de acuerdo? No puedo recuperarlo. Sin embargo, desearía que el béisbol me diera la oportunidad. He sido castigado con bastante severidad», dijo en tono muy serio el tres veces ganador de la Serie Mundial (1975, 1976 y 1980).