Manatí, Puerto Rico – Cobijados bajo la sombra de las ramas de un árbol de violeta, entre momentos de risas compartidas y, otros, de lágrimas de emoción, familiares, colegas y amigos del botánico Miguel A. “Papo” Vives Heyliger, celebraron la inauguración del arboreto que lleva su nombre en la Reserva Natural Hacienda La Esperanza (HLE), en Manatí.
El Arboreto Miguel A. “Papo” Vives Heyliger fue dedicado en honor a este educador y experto autodidacta en la flora de las islas de Puerto Rico y el Caribe. Oriundo del pueblo de Quebradillas, Vives Heyliger ha contribuido extensamente a avanzar el conocimiento y concientizar sobre la conservación de la flora nativa del archipiélago puertorriqueño y del Caribe. Celebrando su profundo conocimiento y compromiso con la protección de la naturaleza, le han llamado el “Sacerdote del Bosque”. Sus numerosos hallazgos y contribuciones a la flora de Puerto Rico lo han llevado a recibir el prestigioso grado Doctorado Honoris Causa otorgado en el año 2012 por la Universidad de Puerto Rico, Recinto Universitario de Mayagüez.
La colección contiene más de 1,000 árboles, arbustos y plantas científicamente documentadas, que representan más de 46 familias y 160 especies procedentes del Banco de Puerto Rico (Puerto Rico y las Islas Vírgenes) y otras partes del Caribe insular. Más del 25% de las especies arbóreas endémicas de Puerto Rico se cultivan en la colección, de las cuales varias se encuentran en peligro de extinción. La fuente de semillas y propágulos de la mayoría de las plantas se han obtenido principalmente de poblaciones silvestres naturales, algunas localizadas en pequeños fragmentos de bosque que tienen poblaciones altamente amenazadas.
Varias de las especies sembradas incluyen; mato amarillo (Caesalpinia major), ortegón (Coccoloba rugosa), guayabota de Fajardo (Eugenia fajardensis), nisperillo (Manilkara valenzuelana), guasábara (Eugenia dominguensis), murta (Eugenia cordata), palmas reales (Roystonea borinquena), molinillo (Hura crepitans) y almendro (Terminalia cattapa).
La misión del espacio natural es promover la conservación de los árboles y la flora nativa y endémica de Puerto Rico y el Caribe, a través de una colección que muestra la importancia de proteger los ecosistemas. El arboreto es una herramienta, tanto para la conservación, como para la educación y la investigación, con un acercamiento interdisciplinario que estudia la propagación de semillas, la interacción entre plantas y animales, los suelos, la fenología, las historias de vida, el paisajismo, la biología de la conservación y los protocolos de siembra para diferentes especies.
“Estoy muy agradecido por esto. Hay que mantener esta reserva para que ella se desarrolle como sabe hacerlo. El ecosistema sabe cómo trabajar. Se deben seguir rescatando sitios (naturales) porque mientras más sitios se rescaten, más suerte tenemos nosotros de conservar. Mi familia debe estar contenta porque este arboretoserá un lugar en el que me recuerden cuando yo no esté”, comentó el homenajeado, Miguel A. “Papo” Vives.
Por su parte el licenciado Fernando Lloveras San Miguel, presidente de Para la Naturaleza, expresó, “todo esto fue impulsado grandemente por la enseñanza y el ejemplo de Papo Vives. En el 2021, comenzamos con la iniciativa del Instituto de Botánica con miras a tener una unidad dedicada a la investigación y a la educación sobre la botánica en Puerto Rico”.
Lloveras San Miguel agradeció también al equipo de Hacienda La Esperanza: la superintendente de la Región Norte, Karen Bunce Rodríguez, y al coordinador de manejo, Alcides Morales Pérez -quien es el gestor principal del arboreto-, y a todo su equipo.
El arboreto está abierto libre de costo de miércoles a domingo en el horario de 9 a. m. a 4 p. m. Puedes comunicarte al 787-722-5834, ó visitar pln.org/arboretohle para más información.