Chilpancingo (México) (EFE) – Animales del Zoológico de Chilpancingo, capital del estado mexicano de Guerrero, fueron vendidos e intercambiados de manera ilegal y otros sacrificados para el consumo humano por el entonces director José Rubén Nava Noriega, quién fue separado del cargo y está en proceso de investigación.
Las irregularidades en el “Zoochilpan” salieron a la luz después de que en enero se dejó morir a un venado, que fue rescatado por habitantes del fraccionamiento Jardines de Zinnia, el cual fue trasladado al lugar con heridas leves y sin embargo murió.
El secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Guerrero, Ángel Almazán Juárez, informó este martes de manera virtual que, como resultado de las investigaciones, se supo que el ejemplar no fue atendido de manera adecuada, pues se le suturó sin anestesia y se le cortó la cornamenta.
Entre las irregularidades detectadas está el intercambio ilegal de cuatro ejemplares de watusi, una raza bovina originaria de África, a una persona del Estado de México por herramientas varias, así como una cebra a cambio de tres ciervos rojos a otra persona de Querétaro.
Aún se desconoce el destino real de los animales y si cuentan con las condiciones adecuadas para su manutención, como obliga un intercambio legal.
Por esas transacciones, el investigado recibió también 65 mil pesos (3.450 dólares al cambio de hoy) y ocupó a trabajadores del zoológico como testigos sin tomar en cuenta al Consejo Asesor, que es conformado por dependencias federales y estatales, así como asociaciones civiles.
El jefe del Departamento de Vida Silvestre de esa Secretaría, Fernando Ruiz Gutiérrez, informó que había 10 ejemplares de cabras pigmeas, de las que el ahora ex director dispuso de cuatro para utilizarlos en la posada de fin de año. Fueron sacrificadas y cocinadas en las instalaciones del mismo zoológico.
«Con este hecho se pone en riesgo la salud de los consumidores porque no eran animales aptos para el consumo humano», dijo.
Otras seis fueron dadas de baja del inventario por supuestos motivos de intercambio, añadió.
También informó de que el tiempo que Nava Noriega estuvo al frente como director hubo varios nacimientos en el zoológico que no fueron dados de alta y registros apócrifos sobre la muerte de otros animales.
Un jaguarundi que fue entregado al zoológico, rescatado en la región de Tierra Caliente, también en Guerrero, está desaparecido, al igual que un coyote hembra, 10 ejemplares de reptiles, una cría de guacamaya y un halcón de cola roja que presuntamente fue liberado sin autorización correspondiente.
Según expusieron las autoridades, Nava Noriega entregó facturas de cifras bajas de un horno de microondas y una impresora para justificar el dinero que había recibido y se detectó que utilizó facturas apócrifas de un laboratorio propiedad de su familia, así como la compra de fármacos qué no se emplean en animales silvestres.
El secretario aseguró que entre las pruebas hay documentos, testimonios de trabajadores y fotografías, pero que se continuará con las investigaciones para determinar responsabilidades y dar con el paradero de los animales desaparecidos.
Para finalizar, aseguró que el proceso de investigación no es nada personal contra el exdirector.