Sobre 200 ciudadanos, líderes comunitarios, ambientalistas y expertos se reúnen en Asamblea del Pueblo para denunciar contradicciones del proyecto propuesto
Por Sebastián Castrodad Reverón
Para EN BLANCO Y NEGRO
La amenaza es inminente: la construcción acelerada del proyecto Esencia afectará el ambiente en Cabo Rojo. Decenas de personas se reunieron en la Asamblea del Pueblo ayer y confirmaron que el mega lujoso proyecto que se planifica construir en más de 2,000 cuerdas de terrenos, especialmente protegidos por ley por ser un hábitat crítico para especies vulnerables y en peligro de extinción, incluirá dos campos de golf, 500 cuartos de hotel y más de 900 residencias lujosas.
A eso de las 10 de la mañana de ayer, ya más de 200 personas se dieron cita en el teatro de la Biblioteca Municipal de Cabo Rojo para escuchar una serie de ponencias que arrojaron luz sobre las contradicciones de la propuesta del proyecto.
Entre los deponentes había miembros de múltiples organizaciones de base comunitaria, un geólogo, un ecólogo, planificadores, líderes de base, ambientalistas y ciudadanos que se autoconvocaron en una ‘Asamblea del Pueblo’ ante la preocupación por el daño que representa ese proyecto para Cabo Rojo y la zona este. Se ha anunciado que el proyecto costará más de $2,000 millones.
La Asamblea del Pueblo se organizó como respuesta “ante la negativa del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) a organizar vistas públicas, según ampliamente solicitado por la ciudadanía, y la acelerada e irregular certificación de la agencia, a finales de agosto de 2024, de la solicitud de deslinde que incluye bienes de dominio público, presentada en julio por la compañía desarrolladora”, sostuvo Damarys Burgos, de la Brigada Solidaria del Oeste.
“Ese terreno está estipulado en un lugar donde el suelo está catalogado como Suelo Rústico Especialmente Protegido Ecológico. Esa designación se supone que tenga la máxima protección posible dentro del tema administrativo y judicial en Puerto Rico, así que hacer un proyecto de esta naturaleza, de esta envergadura, del tamaño que se propone en ese sitio… obviamente es una violación a toda la política pública vigente en Puerto Rico”, dijo Pedro Valle, líder ambientalista y presidente de la junta de directores del Comité Caborrojeño Pro Salud y Ambiente.
Jannette Ramos, de Sea Grant y el Comité por la Verdadera Esencia del Suroeste, enfatizó que “hay yerbas marinas que serían impactadas por la marina… yerbas marinas que tienen una función muy importante porque de ahí se alimentan las tortugas marinas y los manatíes, ambos en peligro de extinción”.
Por su parte, Héctor Quintero, ecólogo especialista en aves endémicas, contó que en el momento en que se enteró de este proyecto, entendió que era necesario crear un frente amplio de grupos para poder oponerse al mismo. “Nos estamos enfrentando a un monstruo grande y que pisa fuerte, con muchos recursos, con el gobierno respaldando totalmente el proyecto”, dijo Quintero.
Pese a la preocupación por el impacto irreversible y destructivo que tendría la construcción de una obra de estas dimensiones, Quintero advirtió que “hay algunos números que no cuadran. Ellos (Esencia) anuncian que solamente se van a usar 25% de las tierras, pero cuando yo veo el mapa, pues no se ve el 25%; se ve lleno completo. Lo que pasa es que incluyen los campos de golf como parte del ambiente… el hotel y las residencias cubren 998 cuerdas. Eso es el 48.9% del área. El campo de golf incluye 488 cuerdas, lo que representa el 23% del área, y el área de conservación cubre solamente el 20%. O sea, que es opuesto a lo que ellos dicen”.
Sandra Pagán Gallardo, cofundadora de la Brigada Solidaria del Oeste, inició la asamblea advirtiendo sobre “la proliferación de proyectos de construcción de lujo para gente adinerada a quienes se les otorgan exenciones contributivas”.
Organizaciones como El Otro Puerto Rico, Diversxs PR y Amnistía Internacional Puerto Rico han denunciado en múltiples instancias que, en poco tiempo, en Puerto Rico se han comenzado a desarrollar otros proyectos parecidos a Esencia.
“A eso viene la pregunta: ¿cómo beneficia este tipo de desarrollos a los boricuas que aún viven en el archipiélago, donde el promedio de renta ha aumentado de $800 a $2,341 en los últimos cinco años?”, dijo Pagán Gallardo.
Por su parte, el historiador y copresentador del popular podcast Plan de Contingencia, Guarionex Padilla Marty, expresó la preocupación general que hay por ese proyecto al leer la ponencia del Comité por la Verdadera Esencia del Suroeste.
“Nos preocupa el impacto que Esencia dejará sobre las comunidades aledañas, particularmente lo relacionado a la gentrificación, el desplazamiento y el mercado de vivienda en Cabo Rojo y la región, sobre todo a la luz de la ausencia de proyectos de vivienda de interés social y accesible. Un proyecto de las dimensiones de Esencia redundará en el desplazamiento de comunidades, cambios en el acceso a las áreas costeras para los residentes, así como un aumento en los precios de propiedad y, naturalmente, en el costo de vida”, dijo Padilla Marty en su ponencia.
Al terminar las ponencias programadas, se abrieron turnos al piso para preguntas, comentarios y declaraciones de solidaridad. La asamblea terminó con los participantes coreando el estribillo: “¡No a Esencia!”. Justo al finalizar la asamblea, individuos presentes allí recibieron información sobre una posible remoción de terrenos dentro del área del propuesto proyecto Esencia y pudieron comprobar que recientemente se abrió un camino con maquinaria pesada y se rellenó terreno con arena y piedra.