Por Sandra D. Rodríguez Cotto
En Blanco y Negro con Sandra
San Juan, Puerto Rico – Confirmado. El alcalde de Isabela, Miguel “Ricky” Méndez, confirmó el desastre ambiental causado por una planta de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) descargando aguas usadas hasta el mar, que difundimos el lunes. Eso fue tras denuncias de miembros del Campamento Carey al ver decenas de tortugas buscando sobrevivir entre el excremento que salía de un tubo de la AAA.
“Sí, esto es algo bien terrible que viene ocurriendo hace un tiempo. Vimos su denuncia y rápido actuamos. Acabo de salir de la EPA donde puse una querella”, dijo Méndez, a En Blanco y Negro con Sandra.
Se trata de una planta de tratamiento de la AAA que incumple con la ley porque tira el agua sin procesar directamente a la playa, en lugar de hacerlo una vez el agua haya sido procesada. El agua procesada debe tirarse mar adentro como establece la ley, pero tampoco la AAA lo hacía. La planta queda detrás del complejo de edificios turísticos Isabela del Mar, y el problema es de Acueductos y no de esa propiedad, explicó el ejecutivo municipal.
“Me reuní con Carmen Guerrero, la directora de la EPA, y ella nos dijo el monitoreo que están haciendo. Es evidente que esa planta de Acueductos incumple y está contaminando la playa”, dijo Méndez.
Los intentos por obtener una reacción de la directora ejecutiva de la AAA, Doriel Pagán, resultaron infructuosos al momento de publicación. Pero la portavoz de comunicaciones de la Agencia Federal de Protección Ambiental (EPA por sus siglas en inglés), Brenda Reyes Tomasini, confirmó por escrito que, en efecto, estuvieron reunidos con el alcalde Méndez. Explicó además que la EPA lleva un monitoreo de la planta desde el 2009, y la inspeccionan al menos cuatro veces por año. En los últimos siete años ese proceso ha estado supervisado por la ingeniera de esa agencia federal, Lalitssa López.
El lunes en este medio publicamos las denuncias de los ambientalistas Iona Fournier y Ángel “Richie” Torres, ambos miembros del Campamento Carey, quienes estuvieron hace una semana de paseo por Isabela, cerca de la playa Jobos, cuando divisaron decenas de tortugas sacando la cabeza del mar. Cuando iban a tomar fotos es que se percataron del hedor y la descarga de aguas residuales. Tomaron una muestra, que aunque no siguió los protocolos de la EPA, a las 24 de haber sido tomada fue evaluada por personal de la Fundación Surfrider de Rincón, que detectó heces fecales, e.coli y bacterias, cónsonas con descargas de aguas no procesadas.
Torres y Fournier compartieron sus experiencias en sendos vídeos en las redes sociales de Facebook, Instagram y TikTok.
“Estas cosas afectan a nuestro municipio porque tenemos que cuidar el ambiente. No podemos permitir que Acueductos siga haciendo daño. Se supone que sea la EPA quien haga ese monitoreo y por eso fui y me reuní con ellos”, dijo, por su parte, el alcalde Méndez. También dijo que su administración ha cooperado con ambientalistas y que respalda el trabajo que realizan distintas entidades proambiente.
Méndez presentó como evidencia tres documentos que le entregaron en la EPA en los que se da detalles sobre ese proceso de monitoreo, tan reciente como el pasado 5 de abril. Los documentos evidencian que la agencia federal viene detectando irregularidades consistentes en la planta de la AAA desde al menos el 2020, ya que varias de las unidades de esa planta o estaban fuera de servicio u operaban con deficiencia. De los documentos se desprende que el propio operador de la planta, Javier Roldán, admitió que mucho equipo seguía fuera de servicio y que están operando de manera deficiente.
El alcalde Méndez dijo que se comunicó con grupos ambientalistas en Isabela y con personal de AAA porque además de la playa, también tienen problemas de descargas en otras zonas del municipio. Específicamente mencionó cómo las aguas residuales de la AAA afectan comunidades en las carreteras 472 y 112, cerca de una zona industrial.
“Hay que estar constantemente llamando a Acueductos porque las bombas se quedan sin energía y se desbordan las plantas, pero por lo menos esas otras aguas todavía no han llegado a la costa. Es hora de que pongan dinero a la infraestructura de Acueducto. Se suponía que después del huracán (María) y a raíz de ese huracán Acueductos hiciera mejoras para plantas y no lo están haciendo”, se quejó el alcalde.