Más de 8,000 enmascarados desfilan en un evento cargado de cultura, música y medidas de seguridad reforzadas
Hatillo (Puerto Rico) (EFE) – Alrededor de 8,000 personas o «corredores» de 210 grupos ataviados con máscaras y trajes coloridos participaron este sábado en el tradicional Festival de Las Máscaras de Hatillo en Puerto Rico, una costumbre cuyo origen se remonta a las españolas Islas Canarias.
A las 14:00 hora local (18:00 GMT) arrancó el típico desfile de carrozas y el sonido de las comparsas se entremezcló con la música festiva que puso a bailar a los asistentes por las calles del pueblo de Hatillo, en este evento que conmemora el Día de los Inocentes.
Cuando las carrozas finalizan el recorrido en la plaza pública, los grupos enmascarados son evaluados y reciben premios por su originalidad y los temas utilizados en sus disfraces.
Desde el jueves se sucedieron eventos en Hatillo, en el marco de esta festividad, y durante toda la jornada habrá actividades en la principal plaza del pueblo con artesanos, música y diversa gastronomía.
El alcalde de Hatillo, municipio ubicado en el noroeste de la isla, Carlos Román, destacó en un comunicado la implementación de un operativo especial con cámaras de seguridad en diferentes puntos del trayecto.
«Queremos que las más de 70,000 personas que participan del festival gocen del mismo. Es por esto que reitero mi llamado a los líderes de los grupos a que cumplan con los acuerdos y lo establecido en el reglamento», subrayó Román.
A pesar de las medidas establecidas, durante el desfile hubo varios incidentes de seguridad, como ya es habitual en el evento.
La Policía de Puerto Rico informó de un accidente entre una carroza y un vehículo en el que dos menores resultaron heridas y su condición es estable.
Además, los agentes reportaron que un vehículo salió ardiendo y los Bomberos extinguieron el fuego, nadie resultó herido en este suceso.
El último incidente ocurrió cuando cuatro personas resultaron heridas tras volcarse una carroza y tuvieron que ser trasladadas a una institución hospitalaria.
La actividad, celebrada formalmente desde 1970, tiene sus orígenes en la tradición del Día de los Inocentes, fecha que conmemora la orden del rey Herodes de matar a todo varón recién nacido con el fin de acabar con Jesús de Nazaret.
Los hatillanos en la trayectoria del festival han ido incorporando costumbres como la utilización de carrozas, camionetas y vehículos todoterreno, desde donde saltan aun cuando los vehículos están en movimiento.
Los enmascarados hacen bromas entre ellos, vierten crema de afeitar, ron o agua, y se dan golpes y fuertes abrazos.