Los Ángeles (EE.UU.) (EFE) – El legado de la actriz estadounidense Carrie Fisher (1956-2016), famosa por encarnar a la Princesa Leia en la saga «Star Wars», fue reconocido este jueves con una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood (Los Ángeles, EE.UU.) como homenaje póstumo.
«Nunca voy a dejar de echarla de menos, pero me siento muy agradecido por las risas, la sabiduría, la bondad e incluso su actitud de niña consentida con la que me volvió loco durante años», dijo su amigo Mark Hamill, quien dio vida al icónico Luke Skywalker en la aclamada franquicia de temática espacial.
En honor a la intérprete, fallecida de un infarto en 2016, la ceremonia se llevó a cabo en el Día de «Star Wars», la fecha elegida para celebrar anualmente a los personajes del universo ficticio creado por el cineasta George Lucas.
La hija de Fisher, Billie Lourd, estuvo acompañada en el acto por por los autómatas de la saga, R2-D2 y C-3PO.
En su discurso, la también actriz, de 30 años, habló sobre cómo pasó de ser una adolescente «normal» que se avergonzaba de sus padres a convertirse en la fan número uno de su madre, quien aún hoy es idolatrada por miles de seguidores de «Star Wars» en todo el mundo.
«El personaje de la Princesa Leia representa un sentimiento, tiene fuerza, gracia, ingenio y feminidad en su máxima expresión (…) Nadie podría haberla interpretado como mi madre», apuntó.
Lourd resaltó que el trabajo de Fisher iba más allá de «Star Wars» y enalteció el resto de su carrera recordando su importancia en filmes como «Shampoo» (1975) y series como «Catastrophe» (2015), así como sus facetas de escritora, cantante y bailarina.
«Una de mis frases favoritas de mi madre es: ‘Toma tu corazón roto y conviértelo en arte’. Ella lo hizo y espero que haya pasado la antorcha a una nueva generación», comentó.
Al desvelar la placa, Lourd arrojó un puñado de purpurina a la estrella de su madre para continuar con la tradición de Fisher de echársela a sus seguidores.
La hija de Fisher no invitó a la ceremonia a los hermanos de la actriz, Todd, Joely y Tricia Leigh Fisher, al considerar que estos habían sacado partido de su muerte en entrevistas o vendiendo libros con la intérprete como protagonista.
La noticia del fallecimiento de Fisher conmocionó en 2016 a miles de fans de «Star Wars» que adoraban la valentía de esa princesa de icónico peinado, con dos moños a los lados, que luchaba contra el imperio galáctico de Darth Vader.
Un año antes de morir, la interprete había regresado a la saga con la cinta «Star Wars: The Force Awakens» (2015) y había presentado «The Princess Diarist», un libro en el que relataba su experiencia, diversas curiosidades y secretos del rodaje de esas exitosas películas, entre ellos su romance con Harrison Ford.