Debe ser compromiso de todos los puertorriqueños y del gobierno proteger las tierras cultivables en Puerto Rico y garantizar el acceso a estas a nuevas generaciones de jóvenes agricultores. Solo así se podrá avanzar hacia la soberanía alimentaria de la Isla que es tan vulnerable ya que el 85% de los alimentos que se consumen aquí son productos importados.
Esa es una de las lecciones que presenta el documental “Serán las dueñas de la tierra”, que estrena hoy en 10 salas de cine de Caribbean Cinemas.
El mismo muestra en un estilo de cine directo los retos que enfrentan tres jóvenes agricultores, Ian Pagán, Stephanie Rodríguez y Alfredo Aponte, a lo largo de tres años de su faena agroecológica que culminan con las secuelas del huracán María. El documental, filmado entre el 2016 y el 2018, fue dirigido por el cineasta Juanma Pagán Teitelbaum. La producción y guión estuvieron en manos de Mariolga Reyes Cruz, directora del Fideicomiso de Tierras Comunitarias para la Agricultura Sostenible (FiTiCAS).
“Creo que este documental, sin hablar mucho, muestra por qué es fundamental que repensemos cómo vamos a apoyar la agricultura para el beneficio de todes. Una cosa es dirigir las políticas públicas hacia el agronegocio, que supone hacer un negocio de la agricultura. La otra es cómo asegurarnos que la gente tiene acceso justo y equitativo a alimentos saludables, sembrados por gente que pueda vivir dignamente de ese trabajo cuidando de la tierra. Hay que repensar las políticas públicas de agricultura y la gente se tiene que activar para exigirlo y promoverlo”, expresó Reyes Cruz, quien pronto realizará cineforos para proseguir esta discusión pública.
Como parte de las iniciativas para transformar el sistema alimentario de Puerto Rico desde la justicia social y climática, Reyes Cruz plantea que se necesitan cambios de política pública que reconozcan la producción de alimentos sanos para el consumo local como un asunto transversal. “Para enfrentar la crisis climática desde la solidaridad y el bien común, necesitamos políticas públicas que, por ejemplo, entrelacen el cuidado de la naturaleza, la producción de alimentos y el consumo con el acceso justo a la tierra y los salario dignos para quienes siembran”.
Esa es parte de la misión de FiTiCAS, proteger tierras cultivables a perpetuidad para asegurar el acceso justo a quienes practican la agroecología.
“Hay cientos de miles de cuerdas de terrenos designados como agrícolas. Pero la mayoría de esas fincas está en manos privadas. Para garantizar el acceso al alimento, necesitamos que las tierras cultivable estén en manos de quienes las cultivan y cuidan por generaciones”, manifestó la directora de FiTiCAS.
Reyes Cruz señala que se necesita un relevo generacional en la agricultura así como lograr que quienes se dedican a la agricultura tengan ingresos justos.
“La mayoría de los agricultores tiene más de 55 años y solo 11% son mujeres. Hay más proyectos de educación agrícola que oportunidades de trabajo para crear el andamiaje que hará posible que los jóvenes agricultores puedan dedicarse a sembrar. Apoyarles es vital para que se queden. Imaginen la diversidad de trabajos que se pueden desarrollar si las políticas públicas estuviesen dirigidads a cultivar de forma ecológicamente sustentable los alimentos de la canasta básica local y que sean accesibles para la gente de todos los rincones de Puerto Rico”, indicó.
La directora de FiTiCAS recalcó que, según el Censo Agrícola de 2018, la mayoría de la gente que opera fincas gana menos de $20,000 al año.
“Esto contrasta con la realidad de vivir en Puerto Rico, donde el salario mínimo debería estar en $20 la hora según el economista José Alameda.
“Necesitamos incentivos para los agricultores para poder poner el producto en los mercados a precios accesibles y competitivos. La Autoridad de Tierras debería saber que es casi imposible empezar a sembrar fincas en desuso, sin infraestructura y sin apoyo económico para ponerlas a producir y generar ingresos varios meses después de la siembra. Se sabe que lo que ganan los agricultores del dinero que gastamos en la comida que producen es apenas un 15%”, señaló Reyes Cruz.
En cuanto al documental, su director Juanma Pagán Teitelbaum expresó que “Mariolga y yo llevamos más de 10 años documentando a jóvenes agricultores. Tenemos ya una larga relación con estos agricultores, con Ian, con Alfredo, con Stephanie. Literalmente nosotros estábamos allí en sus fincas acompañándolos en los procesos de día a día. Era como estar entre amigos trabajando juntos.
Con “Serán las dueñas de la tierra” no solo la gente que está sembrando se va a sentir identificada. También toda persona que está tratando de poner su granito de arena en este archipiélago, haciendo un país mejor. Un maestro, una mesera, un enfermero, una doctora, todo el que hace el trabajo del día a día, desde abajo con corazón, luchando contra la corriente para tratar de hacer país, y quedarse aquí”.
La pareja Pagán Teitelbaum y Reyes Cruz ha documentado el movimiento agroecológico en Puerto Rico por más de una década. Los primeros trabajos fueron las series “Agroecología en Puerto Rico”, con la organización Boricuá de Agricultura Ecológica y “Cosecha hoy”, para WIPR. “Serán las dueñas de la tierra” es su primer largometraje y ha recibido excelentes reseñas de críticos de cine. Lo próximo será llegar a cada rincón de la isla y a la diáspora.