Nairobi, 10 de febrero de 2022 (EFE) – Si las tendencias actuales se mantienen y el ritmo de vacunación sigue aumentando, África «puede controlar la pandemia de coronavirus en 2022», afirmó hoy la directora de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para África, Matshidiso Moeti.
«La pandemia está entrando en una fase diferente. (…) El virus seguirá entre nosotros, pero con las vacunas y la experiencia acumulada podremos minimizar la gravedad de las oleadas de infecciones», dijo Moeti en una rueda de prensa por vídeo.
Contra todo pronóstico, incluidas las enormes desigualdades en el acceso a las vacunas, (África) ha resistido a el covid-19 con resiliencia, determinación y la larga experiencia del continente en el control de brotes (de enfermedades)», añadió la doctora.
Aun así, Moeti reconoció que África ha pagado un alto precio, «con más de 242,000 muertos y un daño tremendo a nuestras economías».
Moeti celebró las lecciones aprendidas del continente, que «se ha vuelto más hábil, rápido y mejor preparado para responder a cada aumento de casos», hechos que permitieron que las últimas olas de infecciones hayan sido mucho más cortas que las anteriores.
«Aunque el covid-19 estará con nosotros a largo plazo, hay luz al final del túnel. Este año podemos terminar con la interrupción y la destrucción que el virus ha dejado a su paso y recuperar el control de nuestras vidas», agregó la jefa de la OMS para África.
Desde que empezó la pandemia, el número de laboratorios en África capaces de detectar el covid-19 ha aumentado desde dos a más de 900, y la cifra de plantas de producción de oxígeno creció un 60%.
Asimismo, mientras África sólo contaba en 2020 con ocho camas por cada millón de personas en las unidades de cuidados intensivos, en la actualidad tiene 20 camas por cada millón de habitantes.
Sin embargo, África sigue siendo el continente con menos personas vacunadas contra el coronavirus –alrededor del 11% de la población adulta ha recibido la pauta completa–, pero Moeti celebró que, en relación al año pasado, los países africanos ahora están recibiendo «un suministro constante de dosis».
Desde el 14 de febrero de 2020, cuando Egipto informó de la primera infección de coronavirus detectada en suelo africano, el continente ha registrado 242,000 muertos y cerca de 11 millones de casos de coronavirus.
Además, según datos del Banco Mundial, la pandemia de coronavirus ha empujado a 40 millones de africanos a la extrema pobreza.