SAN JUAN, Puerto Rico – Los fuegos artificiales y la pirotecnia durante la Navidad y la despedida del año pueden ser momentos de gran estrés para las mascotas, debido a los fuertes ruidos y estímulos visuales que generan. Las mascotas, con su agudo sentido auditivo, pueden experimentar miedo, ansiedad y otros problemas de salud a causa de la pirotecnia. Además, el humo y las chispas pueden irritar sus sentidos y causar lesiones.
Es común que las mascotas, asustadas por el ruido de la pirotecnia, intenten huir o se escondan, lo que puede llevar a accidentes o pérdidas. Los gatos, por ejemplo, podrían perseguir explosivos y sufrir lesiones graves. También existe el riesgo de que las mascotas ingieran restos de pirotecnia, lo que puede provocar intoxicaciones graves debido a sustancias como el nitrato de potasio, carbón y azufre.
Los síntomas de ansiedad en las mascotas por la pirotecnia incluyen ladridos o maullidos excesivos, agresividad, desorientación, salivación, jadeos, vómitos, diarrea, taquicardia y temblores. Estos síntomas pueden ser más severos en mascotas mayores o con condiciones médicas preexistentes, y pueden persistir incluso después de finalizados los fuegos artificiales.
Para ayudar a las mascotas a manejar mejor estos eventos, se recomienda identificar un espacio tranquilo y seguro en casa, cerrar ventanas, poner música suave, proporcionar juguetes calmantes, y asegurarse de que la mascota esté identificada con un collar o microchip. También es beneficioso estar presente y tranquilizar a la mascota durante y después del evento.
En casos de ansiedad severa, es aconsejable consultar con un médico veterinario para evaluar opciones de medicación. Si la mascota muestra niveles altos de ansiedad después de la exposición a la pirotecnia, se debe buscar atención veterinaria.
Para más información, puede contactar al Colegio de Médicos Veterinarios de Puerto Rico al 787-520-0237 o visitar su página de Facebook en www.facebook.com/CMVPR.