San Juan, 27 de octubre de 2021 – Aunque las clases de manera remota debido a la pandemia del COVID-19 han contribuido al descenso en los casos reportados de bullying, el temor de muchos padres es que el regreso a clases presenciales también signifique el regreso al acoso escolar.
“Es un tema en que todos nos vemos afectados, no tan solo los jóvenes y niños”, dice Carmen María Berríos, quien reside en Caguas, y es madre de dos niñas de 2 y 14 años de edad respectivamente. Explica su preocupación ante esta conducta diciendo, “De la misma manera como es presencial, también es virtual, y lo hemos vivido”.
Hace 15 años se declaró el mes de octubre como el “Mes de Prevención Contra el Acoso Escolar”, o “bullying”, pero la presencia de la tecnología en la vida de los niños abre una nueva puerta al acoso. Con solo un clic, los abusones pueden burlarse, hostigar y amenazar cruelmente a través de los medios electrónicos. Como resultado, las víctimas sienten desesperación, aislamiento y hasta impulsos suicidas.
¿Qué pueden hacer los padres para proteger a sus hijos? El National Parent Teacher Association indica que mantener un interés activo en la vida que los niños tienen en línea puede marcar la diferencia, aunque esto no significa que los padres tienen que convertirse en expertos en la tecnología. Más bien, el sitio web stopbullying.gov sugiere a los padres estar pendientes de cambios en el comportamiento de sus hijos; por ejemplo, que se vuelvan retraídos, que oculten la pantalla de su celular o reacciones emocionales a lo que aparece en sus dispositivos.
Para Alex y Jessie Rowe, residentes de Aguadilla, esto significa sacar tiempo, aunque sea un poco, para estar con cada uno de sus tres hijos por separado. “De esa manera resulta más fácil llegar a conocerlos, no como un grupo, sino como individuos, y detectar si algo anda mal”, menciona Alex.
Hablar frecuentemente y de manera abierta con los niños también ayuda. En su sección de consejos para madres y padres, la página cibernética de la UNICEF dice: “Cuanto más le hables a tu hijo sobre el tema, más cómodo se sentirá para contarte si ha sido testigo o víctima”.
Para Héctor, esposo de Carmen María, tener una comunicación abierta es lo más importante dentro de su familia. “Trato de reaccionar lo más natural posible”, dice sobre las conversaciones que tiene con su hija de 14 años.
Los expertos indican que, además de hablar, escuchar y observar, los padres no deben tener miedo de establecer normas para sus hijos en lo relacionado a sus actividades en línea.
Para José Luis y Yarah Resto, residentes de Caguas, y quienes tienen dos niñas de 9 y 16 años de edad, estar muy pendientes de lo que hacen sus hijas en internet es vital. “El acoso a través del internet ha puesto en peligro a muchas familias, y especialmente a los menores”, dijo José Luis.
A las niñas se les permite jugar juegos en línea, y Yarah indica que “hay controles en los diferentes dispositivos, como contenido basado en edad”. José Luis añade: “Cuando les ponemos límites, les explicamos el porqué. Así no hay que estar tan pendiente a ellas, porque ellas mismas vienen a decirnos lo que están haciendo”.
Además, todas estas familias han considerado con sus hijos los consejos y recordatorios que están disponibles para descargar gratuitamente en el sitio oficial de los testigos de Jehová, www.jw.org. Hablando específicamente sobre los peligros asociados a las actividades en línea, la hija mayor de Carmen María recomienda el video animado “Si usas las redes, no te enredes”, y añadió: “Me ha ayudado a mí a tener precauciones en sentido de las redes y las amistades en línea”.