Anfitriones en la isla encuentran un apoyo crucial en la plataforma en tiempos de inflación y altos costos de vida
San Juan, Puerto Rico – El papel de Airbnb en la economía familiar de Puerto Rico ha ganado importancia en los últimos años, convirtiéndose en una fuente de ingresos clave para muchos boricuas que encuentran en la plataforma una manera de hacer frente al incremento del costo de vida, según informó la empresa.
Según datos y encuestas recientes compartidos por Airbnb, ser anfitrión no solo apoya la economía local, sino que también ofrece opciones accesibles para los viajeros que buscan conocer la isla de una manera más auténtica.
Una encuesta realizada a los anfitriones en Puerto Rico reveló que casi el 70% no tiene como actividad económica principal el alojamiento en Airbnb, ya que muchos poseen otros trabajos o profesiones en diversos sectores de la economía. Sin embargo, el impacto de ser anfitriones ha sido significativo: el 50% de los encuestados indicó que esta actividad les ha permitido cubrir gastos esenciales, como alimentos y artículos de primera necesidad, necesidades que han aumentado de precio en los últimos años. Además, un 50% afirmó que gracias a los ingresos obtenidos a través de la plataforma, han podido conservar sus hogares.
Carlos Muñoz, Director de Políticas Públicas y Comunicaciones de Airbnb para Centroamérica y el Caribe, destacó que la misión de Airbnb es democratizar el turismo en la isla y dar a los boricuas la oportunidad de generar ingresos extra.
“La plataforma de Airbnb se encuentra disponible para todos los boricuas, permitiéndoles crear anuncios de sus espacios. La prioridad de Airbnb es promover la plataforma para las personas comunes que buscan obtener ingresos extra en estos tiempos de inflación y democratizar el turismo, llevándolo a áreas en las que no se observa esa actividad en la isla”, indicó Muñoz en comunicado de prensa.
Uno de los testimonios que reflejan el impacto de Airbnb es el de Carmen Cales, una anfitriona de Yauco que comenzó a recibir huéspedes después de retirarse.
“Después de jubilarme, mi hija me habló de Airbnb, y me motivé a embarcarme en esta nueva etapa de mi vida. No me arrepiento; los ingresos han sido muy favorables para mi familia. Tengo una niña con impedimento, y aquí en Puerto Rico hay muy poca ayuda y recursos, así que este ingreso me ha permitido darle una mejor calidad de vida”, compartió Cales.
El perfil de los anfitriones en Puerto Rico también refleja una diversidad importante: cerca del 50% se identifican como mujeres, mientras que un 20% son personas retiradas que encuentran en Airbnb una oportunidad de ingresos que complementa sus pensiones. Estos datos subrayan la relevancia de la plataforma para muchas personas en la isla que buscan enfrentar los retos económicos actuales.
Para más información sobre cómo convertirse en anfitrión en Airbnb, los interesados pueden visitar la página oficial de la plataforma.