Quito (EFE) – Turismo cultural, ecológico, natural, vivencial, de aventura, de negocios, de romance, gastronómico e incluso religioso se dan cita a la vez y al mismo tiempo en Quito, la capital de Ecuador, que recibió entre enero y julio a unos 357.000 visitantes extranjeros.
Así se ha dado en el ‘mes del turismo’ en la capital ecuatoriana, que en cuestión de pocos días ha acogido uno de los acontecimientos mundiales del catolicismo y el mayor congreso de la industria turística de Latinoamérica, a la par que ha seguido recibiendo visitantes para conocer sus monumentos históricos, su entorno natural y su gastronomía.
De los más de 357,000 turistas extranjeros que llegaron a Quito desde enero hasta julio de este año, más de 233,000 procedieron de Estados Unidos, lo que representa un 65% del total de visitantes llegados a la capital ecuatorianos.
A Estados Unidos le siguen Colombia, con más de 85,000 turistas; España, con más de 47,000 visitantes; y Perú, con más de 40,000.
Atraídos por la Mitad del Mundo, ya que la línea ecuatorial pasa a pocos kilómetros al norte de Quito, los turistas que llegan a la ciudad se encuentran con uno de los centros históricos mejor conservados de Latinoamérica, declarado patrimonio de la humanidad desde 1978 por la Unesco.
Entre sus calles y construcciones de origen colonial se puede recorrer un conjunto de iglesias de gran valor arquitectónico y artístico, como la Iglesia de la Compañía, donde deslumbra el pan de oro que recubre prácticamente la totalidad del espacio.
Congresos religiosos y de negocios
Durante la segunda semana de septiembre, las iglesias quiteñas adquirieron un protagonismo especial con la celebración en la capital ecuatoriana del 53 Congreso Eucarístico Internacional, uno de los mayores acontecimiento del catolicismo, que propició la llegada a la ciudad de unos 2,500 participantes internacionales de países tan variados como Corea del Sur, México, Filipinas y Australia, entre otros.
Para Etzon Romo, gerente general de Quito Turismo, agencia municipal de promoción de la ciudad como destino turístico, el Congreso Eucarístico Internacional demostró el potencial de la capital de Ecuador para albergar acontecimientos de carácter mundial, pues unas 51,000 personas participaron en sus distintas actividades, la mitad de ellas de fuera de la ciudad.
También seguidamente la capital ecuatoriana acogió el Travel Mart Latin America, la mayor reunión de la industria turística a nivel regional, donde Quito se posicionó frente a más de 90 agencias turísticas, principalmente de Norteamérica y Europa.
Aventura en la naturaleza
Los participantes de estos eventos también tuvieron oportunidad de conocer el lado rural de Quito, que ofrece un amplio abanico de actividades de aventura y de naturaleza a pocos minutos del núcleo urbano.
Es el caso del Chocó Andino, una reserva de la biosfera que abarca hasta 287,000 hectáreas al noroeste de la zona urbana, pero también de la Ruta Escondida, que permite descubrir centenarios pueblos enclavados en los Andes.
En estos espacios hay oportunidad de practicar turismo vivencial, ecológico y sostenible, pero también hay lugar para la aventura.
Por ello, Romo anticipó el lanzamiento de la primera ruta de aventura de ciclismo, que permitirá recorrer en bicicleta una serie de comunas del noroccidente de la ciudad.
«La idea es que podamos subir las noches de pernoctación (de turistas en Quito) y eso le genere más ingresos a la industria turística, porque a 45 y 50 minutos (del centro histórico) podemos mostrarle la naturaleza de Quito y vincularla con la parte patrimonial», dijo Romo.
Gastronomía y romance
En la parte gastronómica, Quito destaca por sus restaurantes de alta cocina como Nuema, ubicado en el puesto 11 de la lista de los mejores 50 restaurantes del mundo, debido a su cocina típica y popular que se puede apreciar en las tradicionales huecas y en los mercados más emblemáticos.
Asimismo, hay espacio para el turismo de romance, un nicho que en los últimos años ha experimentado un notable crecimiento en América Latina, y Quito forma parte de ello al ubicarse en el mapa como un destino para bodas y eventos románticos internacionales.
Sus construcciones coloniales bien ambientadas con elegantes jardines resultan un escenario elegido incluso por parejas extranjeras para una pedida de mano, la boda, la luna de miel, renovaciones de votos o simplemente un viaje en pareja.
En los próximos meses esta variedad de oportunidades de turismo en Quito será promocionada en distintos países como Estados Unidos, Canadá, Panamá, México, España, Reino Unido y Alemania, tras haberlo hecho previamente ya en Brasil, Chile y Perú.