La obra autobiográfica que abrió las puertas a las escritoras hispanas en Estados Unidos celebra su legado, capturando la experiencia de la identidad puertorriqueña y su relevancia en la literatura americana
San Juan, Puerto Rico – Hace tres décadas, en 1993, el mundo literario recibió con entusiasmo la publicación de «Cuando era puertorriqueña», las memorias de Esmeralda Santiago. Este libro, que en 1994 fue traducido al español, se convirtió en un logro para la representación de las escritoras hispanas en Estados Unidos, un grupo que hasta ese momento carecía de la visibilidad que merecía en el panorama literario del país.
«Cuando era puertorriqueña» es una memoria poderosa y conmovedora que relata la infancia y adolescencia de Santiago, comenzando con su vida en Puerto Rico y continuando con su migración a Estados Unidos, donde enfrentó el desafío de adaptarse a una nueva cultura sin perder sus raíces. A través de una prosa lírica y evocadora, Santiago no solo documenta su experiencia personal, sino que también ofrece una reflexión profunda sobre la dualidad de crecer entre dos mundos, capturando la esencia y complejidad de la identidad puertorriqueña.
Esta obra abrió el camino para que otras escritoras hispanas pudieran compartir sus historias, contribuyendo significativamente a lo que hoy entendemos por literatura americana. Julia Álvarez, destacada autora y contemporánea de Santiago, celebra esta edición con palabras de admiración, subrayando que «Cuando era puertorriqueña» es más que una autobiografía; es un testimonio inspirador que amplía nuestra comprensión de la literatura y de las diversas voces que la componen.
Treinta años después, «Cuando era puertorriqueña» sigue resonando con fuerza, recordándonos la importancia de la representación en la literatura y el poder de una narrativa que trasciende fronteras. La obra de Esmeralda Santiago no solo ha inspirado a innumerables escritores hispanos, sino que también ha consolidado su lugar como una pieza fundamental del canon literario estadounidense.